Aseguran que el Gobierno, la oposición y la izquierda abertzale serán "responsables políticos" si el proceso fracasa
MADRID, 12 Dic. (EUROPA PRESS) -
El grupo parlamentario de ERC en el Congreso ha iniciado contactos con las formaciones políticas catalanas, gallegas y vascas con presencia en la Cámara Baja con la intención de articular un "foro" desde el que exigir al Gobierno que "mueva ficha" y asuma "riesgos" para evitar que el proceso de paz fracase y que, como medida de distensión se plantee el acercamiento de presos de ETA a cárceles del País Vasco y Navarra.
Así lo explicaron hoy en rueda de prensa en el Congreso el presidente y el portavoz de los grupo de ERC, Agustí Cerdà y Joan Tardà, respectivamente. Ambos explicaron que apenas reciben información del Gobierno sobre la situación que atraviesa el proceso, que prácticamente sólo saben lo que publican los medios de comunicación y que lo que leen les "alarma".
Por ello, han decidido tomarse "en serio esas voces de alarma" y empezar a hacer todo lo que esté en su mano para que el proceso sea "irreversible" porque si éste no desemboca en el fin de la violencia sería "un fracaso de la democracia en términos políticos con responsables políticos", ya que tanto el Gobierno como la oposición y la izquierda abertzale tienen la "responsabilidad" de hacer avanzar el proceso.
"SI EL GOBIERNO NO PONE PISTA EL PROCESO SE ESTRELLA"
El presidente del grupo de ERC recurrió a un símil para describir la situación en la que, a su juicio, están la cosas. Así, presentó a ETA como "un avión sin combustible" que espera que desde la torre de control se le dé "permiso para aterrizar". "O aterriza o se estrella y el Gobierno es el responsable de poner la pista de aterrizaje", aseveró.
Cerdà dejó claro que, desde su punto de vista, también la izquierda abertzale es responsable de "llevar el proceso por buen camino", pero insistió en la necesidad de dar "un tirón de orejas" al Ejecutivo por no haber buscado las suficientes "complicidades políticas" para hacer avanzar el proceso.
En su opinión, "la dinámica desde el anuncio de tregua es que no se mueva nada", pero esto no puede seguir así, porque "para que pase algo" hay que "arriesgar un poco", a no ser que lo que se quiera es "volver a la situación anterior", algo que no puede permitirse ni la sociedad española ni Europa.
FIN DE LA VIOLENCIA CALLEJERA
Para hacer "fuerza" en la defensa de esta tesis, los republicanos aspiran a formar un frente con los partidos catalanes, gallegos y vascos con representación en el Congreso. Su objetivo es "intentar crear un foro que pueda exigir a unos y otros que el proceso no tenga fin" e intentar activar "algún mecanismo con voz conjunta" que fomente escenarios de diálogo.
Tardà, quien ya reclamó un acercamiento de presos hace una semana, insistió hoy en la conveniencia de "presionar para que cunda la responsabilidad se cumpla la ley" que establece que los internos deben cumplir condena en la prisión más cercana a su lugar de residencia.
Por su parte, Cerdà reconoció que ni un acercamiento de presos ni el fin de la violencia callejera serían "definitivos" para que el proceso triunfase, pero recalcó que ambas medidas "ayudarían" en la consecución de la paz. "Acercar presos y acabar con la kale borroka serían una baza importante, pero hay que ir pasito a pasito", explicó.
