MADRID, 14 Mar. (EUROPA PRESS) -
Los obispos han avalado el talante del arzobispo de Valladolid, el cardenal Ricardo Blázquez, al reelegirle como presidente de la Conferencia Episcopal (CEE), y piden con la elección del arzobispo de Valencia, el cardenal Antonio Cañizares, como vicepresidente de la CEE, una Iglesia presente en temas actuales, según han valorado expertos en Iglesia.
En concreto, el vicedecano de la Facultad de Teología de la Universidad de Navarra, el profesor César Izquierdo, ha explicado a Europa Press que "la reelección del cardenal Blázquez en primera votación como presidente de la Conferencia Episcopal Española significa una confirmación clara de su liderazgo al frente de la Iglesia en España".
"Muestra que los obispos están de acuerdo con su postura firme, y a la vez templada, en los temas que afectan más de lleno a la Iglesia y a la sociedad. Por otra parte, la elección del cardenal Cañizares para la vicepresidencia aportará probablemente un punto de mayor presencia activa de la Iglesia en los temas candentes de la actualidad", ha detallado.
Por su parte, el experto en esta materia y director de la revista 'Ecclesia', Jesús de las Heras, ha indicado que la primera de las claves es la normalidad. "Resulta normal, así lo avala la historia de la Conferencia Episcopal Española, la elección del presidente para un segundo periodo. Así ha acontecido prácticamente en toda su historia", ha remachado.
En su opinión, a esta normalidad le acompaña, en este caso, el servicio y el talante de Blázquez que, según ha precisado, se caracteriza por ser "prudente, discreto, sencillo y amable". "Todo el que le conoce, en seguida, queda impresionado por estas notas. Ha realizado una gestión muy digna durante estos tres años", ha precisado.
La renovación que, según ha señalado De las Heras, siempre ha acompañado también los procesos en la CEE, ha llegado de mano de la Vicepresidencia con la elección del cardenal Antonio Cañizares, lo que a su juicio, sitúa a la Iglesia en el "periodo primero", en referencia al trienio 2005-2008 en el cual Blázquez fue presidente de la CEE y Cañizares, vicepresidente.
Para De las Heras, la tercera clave sería la de "mantener e incrementar" algunas de las notas que han caracterizado el trabajo de los obispos durante los últimos tres años, en las que está muy presente el espíritu y la letra del Papa Francisco.
Así, se ha referido a una Iglesia "misionera o en salida" consciente de que es necesaria "una nueva evangelización que toma conciencia de que los viejos tiempos en España donde el catolicismo era una realidad incontestable ya no existen" y una Iglesia más volcada en las pobrezas y las periferias, "para sanar heridas de crisis económicas, de principios y valores".
