MADRID, 9 May. (EUROPA PRESS) -
El cardenal arzobispo de Madrid y presidente de la Conferencia Episcopal Española, Antonio María Rouco Varela, ha ensalzado la entrega de Joseph Ratzinger a su vocación sacerdotal en la época nazi, aun habiendo sido introducido en las juventudes hitlerianas y aun habiendo sido hecho prisionero por los americanos "pasando semanas durmiendo en el suelo de un campo de concentración".
"Un joven alemán de veintitantos años al final de los años cuarenta que nace para la vida de la segunda enseñanza de la universidad con el nacionalsocialismo implantado que tenía una pretensión no solo de monopolio político sino como le pasa al otro totalitarismo de la época, un monopolio cultural y humano completo, pues el nacionalsocialismo no se contentaba con que mandasen ellos en la economía, el Ejército, querían conformarlo, cambiar al hombre, querían una nueva raza incluso", ha recordado Rouco Varela.
Así lo ha indicado durante la presentación de la traducción al español de la tesis de Ratzinger 'Pueblo y Casa de Dios en la doctrina de San Agustín sobre la Iglesia' (Ediciones Encuentro) que se ha celebrado en la Universidad San Dámaso.
En este contexto, ha destacado la voluntad de Ratzinger, joven seminarista "con una capacidad intelectual fuera de lo normal", que mantuvo su vocación sacerdotal "con pasión, ilusión, entrega" en un momento en que la Iglesia sufría "una persecución abierta y de forma generalizada" y "lo estaba pasando mal" y a pesar de que a los 16 ó 17 años fue encuadrado en las unidades del Ejército alemán compuestas por adolescentes para después, tras el "desastre final", ser hecho prisionero por los americanos, los cuales, según ha indicado el cardenal, fueron los "más amables" con los alemanes por delante de ingleses, franceses y rusos.
El cardenal ha indicado que el contexto en el que Joseph Ratzinger escribe la tesis estaba marcado por el debate con el liberalismo, "que adelantaba y predecía lo que iba ser el secularismo de ahora" y que "había dominado la cultura, la política financiera, incluso universitaria" lo que "colocaba a la Iglesia en Europa en una situación de inferioridad jurídica, social y cultural completa". Un liberalismo que además, según ha añadido, iba de la mano de "un capitalismo salvaje".
De esta forma, "destruido el país, la Iglesia", Rouco se ha preguntado: ¿Cómo vive la Iglesia tras la derrota de un totalitarismo? ¿Cómo se vivía la evangelización, la vocación sacerdotal? Y ha señalado que la respuesta estaba en la teología del cuerpo místico, en la teología del Pueblo de Dios, título de la tesis de Ratzinger.
Por su parte, el rector de la Universidad San Dámaso, Prades, ha señalado que la obra de Ratzinger, primer fruto de la carrera académica universitaria del ahora Papa Emérito, demuestra su estrecha conexión con el ámbito académico y universitario. En este sentido, ha añadido que Benedicto XVI tuvo una larga vida universitaria desde el año 1954 en el que publicó esta tesis doctoral.
