BARCELONA, 12 Abr. (EUROPA PRESS) -
El sindicato USTEC-STEs ha alertado este viernes de que el Govern planea que el 50% de los puestos de trabajos de los centros públicos catalanes podrán ser elegidos por la dirección de la escuela y evaluados en una comisión, si se aprueba la cuarta versión del borrador del decreto de provisiones de plantillas de la Consejería de Enseñanza de la Generalitat.
En rueda de prensa, la portavoz de USTEC-STEs, Rosa Cañadell, y David Córdoba, miembro del secretariado nacional del sindicato, han hecho público este documento que despliega la Ley de Educación de Cataluña (LEC) y detalla que la dirección "interviene en la definición de los requisitos específicos exigidos para ocupar determinados puestos de trabajo de la plantilla docente", de acuerdo con el proyecto educativo del centro.
Estos requisitos, propuestos por la dirección, pueden ser adicionales, de experiencia del profesor, de titulación o de "capacitación profesional del docente", y pueden proponer características de funciones individualizadas del perfil específico de los puestos de trabajo de especial responsabilidad, reservados al equipo directivo, según el texto.
Según ha explicado Cañadell, se establecerá además una "evaluación del cumplimiento del puesto de trabajo" a través de una comisión, formada por un inspector, la dirección y profesionales que, bajo criterios aún por determinar, controlará si los docentes encajan en el perfil y se estudiará su competencia como profesor.
La asignación "a dedo" afectará, según la portavoz, a todo el personal interino, a los funcionarios sin plaza fija e incluso a los permanentes, a quienes, tras dicha evaluación, pueden reubicar en un centro de la misma zona escolar o adscribirle tareas sin docencia.
Concretamente, USTEC-STEs ha apuntado que la bolsa de interinos dejará de estar regida por criterios de antigüedad como hasta ahora, por lo que "puede dejar sin trabajo a interinos que llevan 20 años trabajando", ha significado Cañadell.
Según el borrador, el director del centro podrá seleccionar también al personal interino docente para cubrir sustituciones temporales que reúna "los criterios de mayor mérito y capacidad y se adecue mejor a las peculiaridades del centro".
"DESMANTELAR EL MODELO DEMOCRÁTICO"
Cañadell ha tildado el borrador de un "intento de jerarquizar las relaciones dentro de los centros y de controlar al profesorado", además desmantelar un modelo democrático de escuela pública, desregularizar la asignación de puestos de trabajo, introducir la arbitrariedad en la selección de la plantilla, y no consolidar los equipos, entre otras críticas.
Por ello, ha pedido a la Consejería la retirada del decreto y ha criticado que el documento se ha gestado durante medio año en la Junta de Directores "en el más absoluto secreto y totalmente al margen de los sindicatos".
