Antonio Soler dice que "el escritor tiene un compromiso social" y parte de lo que hace "tiene una repercusión política"

Actualizado: miércoles, 2 julio 2008 18:09

RONDA (MÁLAGA), 2 Jul. (EUROPA PRESS) -

El malagueño Antonio Soler, que participó hoy en el curso 'Intelectuales y Política en la Historia Contemporánea', en el marco de los Cursos de Verano de la Universidad de Málaga (UMA) celebrados en Ronda, señaló que "el escritor tiene un compromiso social que va más allá del de otras profesiones y parte de lo que hago tiene una repercusión política".

En el transcurso de la mesa redonda 'Intelectuales, escritores y política', el escritor, quien confesó que "la política siempre me ha interesado porque forma parte de mi vida", expuso que "cualquier mundo que el literato invente tiene componentes políticos".

Según el autor de la novela 'El camino de los ingleses', galardonada con el Premio Nadal de 2004, "la política no sólo se manifiesta en un ámbito estrictamente político, sino que se traduce en la calle". En este sentido, declaró que en España "el intelectual está más en una urna de cristal, donde respira su propio aire", mientras que en otros países como Francia "está más comprometido y activo políticamente".

"El intelectual comprometido con la política ha sido una tradición en España que se quebró con la dictadura franquista", aseveró Soler, que añadió que, en la actualidad, todavía no se sabe exactamente cuál es "el papel y la ubicación del intelectual". Sin embargo, "no se puede ir a remolque de lo que quiera la sociedad", manifestó.

Por su parte, el catedrático de Literatura y ex presidente de la Comisión de Cultura del Congreso Rafael Ballesteros Durán opinó que "un partido político que se convierte en cerrado a los cambios sociales es un partido político muerto, por lo que hay que actualizar las ideas políticas, las alternativas, las prioridades y los mecanismos de valoración".

Para Ballesteros, militante en el PSOE desde 1972, "el intelectual tiene mucho que decir precisamente porque es una persona preparada intelectualmente para captar las necesidades de la sociedad y buscar las fórmulas para mejorarla". Asimismo, agregó que la misión del intelectual "es ayudar a las fuerzas políticas", que tienen la obligación de "implantar en la sociedad la solidaridad, la justicia, la participación ciudadana, etcétera".

La tercera intervención de la mesa redonda correspondió al doctor en Literatura y profesor del Dickinson Collegue de Carlisle (Pensilvania, en Estados Unidos) Mark Aldrich, que dijo que como docente e intelectual su cometido es "facilitar el acceso a debates intelectuales" a sus estudiantes y "ayudar a formarlos".