El exgerente del IMAE de Córdoba lamenta que "no se han dado las condiciones" para desarrollar su labor de "renovación"

CÓRDOBA 13 Feb. (EUROPA PRESS) -

El recién cesado gerente del Instituto Municipal de las Artes Escénicas (IMAE) Gran Teatro de Córdoba, Carlos Aladro, tras cinco meses en el cargo, ha lamentado este martes que "no se han dado las condiciones" para desarrollar su labor de "renovación, transparencia y buen gobierno, en definitiva de sanación", y ha sido así desde casi su llegada, a lo que ha añadido que "lo que hay en el IMAE está desde hace mucho tiempo", siendo, a su juicio, "demasiado para una ciudad con el potencial, la belleza y la grandeza de Córdoba".

En una rueda de prensa, Aladro ha manifestado que "si hacia fuera, hacia Córdoba, sus vecinos, personas y colectivos" su experiencia ha sido "extraordinaria y se ha producido una enorme cantidad de sinergias llenas de posibilidades", ha reconocido que "en el viaje hacia el centro del IMAE la experiencia ha sido por el contrario muy frustrante, dura y dolorosa".

Al respecto, ha comentado que ha tratado de tomarse su tarea "como responsable de un maravilloso centro de atención y cuidado de las almas y los corazones, como pueden llegar a ser los teatros de Córdoba, en pro de la estimulación del espíritu lúdico y crítico de la ciudadanía, del público y de los propios artistas, para compensar esta vorágine de subyugantes estímulos y destellos del consumismo capitalista ultraliberal".

Sin embargo, ha expuesto que "lo que ingenua, y muy torpemente, intentamos algunas personas, de toda clase y condición, es poner en transformación unas estructuras y una mentalidad que ya están tan caducas como obsoletas", dado que "lo que apenas funcionó en los años 80, 90 y 2000, hoy está totalmente desfasado, y no atiende a las necesidades reales de un servicio público de cultura del siglo XXI, al servicio del mayor número y diverso de ciudadanos, conectándolos y transformándolos a través del más amplio espectro de lenguajes artísticos, independientemente de su supuesta rentabilidad económica o de su sentido de la utilidad".

Tras asegurar que "no existe ya reparación moral" para él, ni para sus seres queridos ante distintas declaraciones, Carlos Aladro ha indicado que "de lo que sea pertinente, se dará cuenta a la administración de justicia, para lo que buenamente pueda proceder".

Mientras, ha pedido "disculpas a los cordobeses por no haber sido capaz de servirles mejor", al tiempo que ha agradecido "infinitamente y con profunda conmoción" a todas las personas que con sus firmas han refrendado su esfuerzo, "y el de las muchas otras personas que se han ilusionado y me han ofrecido y compartido su entusiasmo y compromiso con el arte y la cultura de Córdoba".