Tras la falta de espacio detectada en el parque de la grúa, se baraja ubicar la unidad en dependencias policiales de la Cartuja
SEVILLA, 15 Jun. (EUROPA PRESS) -
Ningún agente del Cuerpo de Policía Local de Sevilla se ha presentado hasta el momento voluntario para trabajar en la nueva Unidad Telemática de retirada de vehículos, mientras que únicamente un oficial se ha presentado para dicha tarea, contra la que se han manifestado tanto el Sindicato Profesional de Policías Municipales de España (Sppme) como el Comité de Empresa del servicio de grúa municipal (Aussa).
Así lo indicaron a Europa Press fuentes policiales, que manifestaron que la postura del cuerpo sigue siendo mayoritariamente en contra, en tanto las dudas legales que la implantación de esta metodología podría despertar y el hecho de que dicha unidad "no aporta nada a la Policía Local".
Según las fuentes consultadas, la existencia de informes en contra sobre la decisión inicial de ubicar la sede de la unidad en las dependencias 'Alfa III', ubicadas en el parque de la grúa de la avenida Ramón de Carranza de la capital hispalense y que están compartidas por Aussa y la Unidad de Vehículos de la Policía Local --instalaciones denunciadas por los sindicatos ante la Inspección de Trabajo por el hacinamiento existente--, se habría desestimado por la falta de espacio para albergar a los funcionarios.
De esta manera, la nueva localización que se baraja sería la de las dependencias de la Unidad de Tráfico-Motoristas de la Isla de la Cartuja, conocidas como 'Charlie II', para albergar una sede que necesitaría un número de empleados que rondaría las ocho personas.
El Sppme y el Comité de Empresa de Aussa acordaron hace varias semanas emprender conjuntamente "cuantas acciones se crean oportunas" para la defensa de los trabajadores de la grúa y de los policías locales por el actual proyecto de la unidad de retirada telemática de vehículos, un "capricho" que crea "indefensión".
Mientras que el Sppme duda que este sistema sirva para agilizar la retirada de vehículos y afirma que obedece más a un "capricho" que a una "necesidad" del servicio policial, los gruístas ven "inviable" la implantación de este nuevo sistema en las actuales condiciones.
La pretensión del Ayuntamiento es la de llevar a cabo la creación de una unidad que implicaría que la Policía no tuviera que estar presente en el momento de la retirada, bastando la transmisión de una fotografía.
