El alcalde de Huesca dice que las obras de transformación de la travesía de la N-330 en vía urbana finalizarán en enero

Actualizado: lunes, 3 noviembre 2008 17:29

HUESCA, 3 Nov. (EUROPA PRESS) -

Las obras de transformación de la travesía de la N-330 en vía urbana finalizarán a principios de enero de 2009. Año en el que también se acometerá la transformación de la travesía de la N-240 con la previsión de ubicar en esta zona un parking subterráneo. Así lo ha apuntado el alcalde de Huesca y responsable del área de Urbanismo, Fernando Elboj.

Las obras de transformación de la travesía de la N-330 a vía urbana tienen una longitud de 1,5 kilómetros. Esta vía contará con un carril para cada sentido de circulación, un carril bici y una pequeña mediana a la altura de la gran superficie comercial que allí se encuentra ubicada, donde también habrá una rotonda.

Elboj informó que "la rotonda que se construirá a la altura de las instalaciones de la ITV será cerrada". "Hemos valorado que era mejor hacer una rotonda cerrada, porque los expertos consideran que garantiza mejor la seguridad. En el proyecto aparecía como rotonda abierta, con lo cual hemos propuesto esa pequeña modificación", agregó.

Esta obra se adjudicó por 1.650.000 euros, con arreglo a un convenio por el que el Ministerio de Fomento se hacía cargo de la financiación y el Ayuntamiento de Huesca, de la ejecución de la obra. Finalizadas estas obras, la intención es iniciar en 2009 las de la travesía de la N-240, en el Paseo Ramón y Cajal, donde se ubicará la tan demandada rotonda que conectará con la Ronda de la Industria. "En 2009 se ejecutará la obra de esta otra travesía", dijo Elboj, que explicó que "como allí se hizo una modificación del Plan General de Ordenación Urbana se tuvo que modificar el proyecto de obra, y eso hace que hayamos replanteado el conjunto, de tal manera que la estrategia de la obra va a ser o bien realizarla en una sola fase o bien en dos".

Asimismo, el alcalde de Huesca trasladó que el ayuntamiento está pendiente del estudio técnico para comprobar si en el subsuelo del Paseo Ramón y Cajal existen restos arqueológicos que pudieran impedir la construcción de un parking subterráneo. "Si no hay problemas, pasaríamos a adjudicar la construcción y gestión de ese parking, por vía de concurso, a las empresas interesadas".