Expo 2008.- Biel y Fuencalderas exhiben sus atractivos en el Pabellón de la provincia para combatir la despoblación

Actualizado: miércoles, 13 agosto 2008 16:45

ZARAGOZA, 13 Ago. (EUROPA PRESS) -

La localidad zaragozana de Biel y su entidad menor local Fuencalderas han celebrado su jornada en el pabellón de la provincia con el objetivo de combatir la despoblación que sufren estas localidades y que ha provocado que entre los dos sólo cuenten con 180 habitantes cuando en los años cuarenta superaban ampliamente el millar de ciudadanos. Para ello, han dado a conocer un conglomerado de atractivos formado por patrimonio, naturaleza y tradición.

El alcalde de Fuencalderas, Francisco Javier Arbués, ha hecho hincapié de manera especial en esta situación y ha remarcado que el fenómeno se produjo después de que "en la década de los 60 y los 70 la migración se viera salvajemente incrementada como consecuencia de la falta de iniciativas en las localidades", informan desde el Pabellón de la Provincia de Zaragoza en un comunicado.

Por eso, ha solicitado que "se realicen más proyectos como éste de estar presente en la Expo 2008 para impulsar el desarrollo de nuestras potencialidades". Éstas, según el alcalde de la entidad menor, tienen que ver con una ubicación "privilegiada en lo que se refiere a paisaje y naturaleza". Arbués ha agregado que "siempre han sabido conservar el medio en que se han desenvuelto".

Por su parte, el primer edil de Biel, José Luis Lasheras, ha dirigido su discurso en la misma dirección pero realzando el esplendor que tuvo el municipio en el pasado. Reminiscencias de ese momento de gloria son el castillo y la torre "por donde correteó y, posiblemente nació, Alfonso el Batallador, que fue rey de Aragón". Este monumento se encuentra ahora en proceso de restauración y el primer edil bielano ha augurado que "estará abierto para El Pilar".

Asimismo, ha indicado que el otro gran atractivo patrimonial del municipio es la Iglesia de San Martín, en la que destaca el órgano. Ambos están también en fase de restauración, que finalizará en el plazo de un año. El órgano es uno de los que se están recuperando gracias al programa de la Diputación de Zaragoza parta este fin. Junto al atractivo cultural, Lasheras ha sumado la naturaleza del término municipal "que va desde el bosque pirenaico hasta el mediterráneo".

LA RONDA DE BIEL

En ese afán de darse a conocer, Biel ha traído al pabellón una de las actividades más singulares de la población: la ronda. Se trata de una tradición que se perdió pero se ha recuperado desde hace treinta años. "Se recorre el pueblo desde la calle Mayor, seguido de toda la gente, parándose en las casonas del municipio y cantando jotas alusivas a las calles por las que se pasa", ha explicado Lasheras.

La ronda rememora los tiempos en los que los mozos del pueblo salían en ronda para cortejar a las mozas. "Esperemos que podamos cortejar este viernes a todos los visitantes para que visiten Biel", ha deseado el acalde.

La Ronda de Biel ha contado en su actuación con la compañía del cantautor aragonés Gabriel Sopeña. "Soy pelaire apegado, porque mi mujer es hija de pelaire y tenemos casa allí", ha explicado. De ahí que lleve participando desde hace veinte años en la ronda de Biel, "una de las pocas vivas que quedan en Aragón y una de las pocas en la que se utiliza el violín".

Biel también ha repartido entre los visitantes del pabellón 800 ramos de espliego, una planta símbolo de la localidad ya que durante años se cocía para sacar esencia de lavanda y sacarse un sobresueldo. Asimismo, han agasajado a quienes se han acercado al pabellón con una degustación de dulces típicos de la localidad.