EJEA DE LOS CABALLEROS (ZARAGOZA), 9 Ene. (EUROPA PRESS) -
Más de 2.000 personas han visitado el Museo de las tres culturas, conocido como 'La Espiral', en Ejea de los Caballeros desde que abriera sus puertas en mayo de 2007. El visitante puede conocer de una forma didáctica cómo fue el siglo XI en esta zona de Aragón, donde convivieron las culturas hebrea, musulmana y cristiana.
A juicio de la responsable del centro, María Racaj Montañés, la apertura de 'La Espiral' "supuso un antes y un después" para el Casco Histórico de la capital de las Cinco Villas, donde está ubicado el centro. Agregó que la eficacia de este proyecto no se puede medir solo por el número de visitas sino por el valor que tiene como "primera piedra" de un proyecto municipal para la revitalización y recuperación de este barrio de la ciudad.
La 'Espiral' se creó como un centro de interpretación innovador, que integra la arquitectura moderna y la medieval e incorpora avances tecnológicos y arquitectónicos. Pretende ser "un espacio para el pensamiento y la reflexión" acerca de la "implantación de las tres culturas en el Valle del Ebro en la Edad Media", señaló Racaj en declaraciones a Europa Press. La convivencia de las culturas hebrea, musulmana y cristiana, se aborda desde el punto de vista del pensamiento y de la filosofía.
El acceso al centro se realiza por un edificio moderno, ubicado donde se situaba la antigua sinagoga. Al subir al piso superior, se puede acceder por un paso volado a un segundo edificio, la casa del médico judío, que conserva su fachada del siglo XI. Es este edificio el que se desciende por una espiral dividida en diferentes salas.
En los diferentes espacios, se relatan con medios audiovisuales, los temas referentes a las culturas del Valle del Ebro, especialmente la cultura musulmana y judía. En ella se escuchan locuciones sobre la música, la devoción, el lenguaje, la estética, el arte, la ética o la gastronomía.
Hay dos modelos de visitas: visita libre y visita guiada. En la primera, las locuciones de los diferentes espacios se accionan al detectar la presencia humana mediante sensores. La segunda modalidad es la visita guiada por la propia María Racaj en el que se combina las locuciones y las explicaciones de la guía.
El centro, que abre todos los días de la semana, está totalmente adaptado para personas con sillas de ruedas, carritos de niños y para personas con discapacidad auditiva o visual. También existe un recorrido adaptado para discapacitados psíquicos.
