Dos hermanos aceptan un año y medio de cárcel por estafar a un matrimonio con un falso alquiler en Gijón

GIJÓN, 12 Jun. (EUROPA PRESS) -

Dos acusados de estafar a un matrimonio con un falso alquiler en Gijón han reconocido este miércoles los hechos que les atribuía la Fiscalía de Área de Gijón y han aceptado una condena de un año y seis meses de prisión cada uno, junto con el pago de una multa y una indemnización a las víctimas, que habían adelantado dinero en concepto de fianza.

Los procesados, que son hermanos, han llegado así a un acuerdo de conformidad con la Acusación Pública, en la vista oral señalada para este día en la Sección Octava de la Audiencia Provincial de Asturias con sede en Gijón, según una nota de prensa de la Fiscalía.

Los acusados (1975 y 1969), puestos de común acuerdo, contactaron con la víctima, quien junto a su marido había publicado un anuncio en una página web, interesándose en el alquiler de una vivienda en Gijón para utilizarla como vivienda habitual, ciudad en la que ya residían, aportando su número de teléfono como forma de contacto a las personas interesadas.

Sobre las 16.00 horas del 14 de noviembre de 2022, la pareja recibió un mensaje a través de WhatsApp, emitido desde el teléfono del acusado 1, en el que este les dijo, faltando a la verdad, que tenía un piso para alquilar en la calle Julio, y que el alquiler mensual ascendía a 450 euros.

Tras seguir las negociaciones por llamada convencional, llegaron a un acuerdo, añadiendo el acusado que si querían agilizar el procedimiento, antes de visitar la vivienda podían abonar la cantidad de 450 euros, que se convertiría en fianza en el momento de realizar el contrato.

También les explicó que la vivienda era propiedad suya y de su mujer y, para dar muestras de confianza, les envió a través de WhatsApp la fotografía del anverso de un DNI a nombre de una mujer, indicando que era el documento nacional de identidad de su esposa, cuando su propietaria era en realidad totalmente ajena a estos hechos y había denunciado su sustracción en Alicante el febrero de 2020.

Los interesados accedieron a lo solicitado, concertando una cita con el supuesto arrendador a las 18.45 horas del 14 de noviembre en el portal del edificio, abonado previamente la cantidad de 450 euros a través de un ingreso en un cajero.

Al acudir a esa hora a la cita y, tras esperar un tiempo sin que acudiera persona alguna, decidieron llamar por teléfono al supuesto arrendador.

Tras numerosas llamadas, el teléfono figuraba como no disponible, ante lo cual le enviaron varios mensajes de WhatsApp, comprobando que no se activaba el segundo tic de confirmación.

Decidieron entonces llamar a las viviendas del segundo piso del edificio, donde los vecinos les indicaron que el piso no estaba en alquiler. La cuenta a la que se mandaron los 450 euros fue contratada vía online por uno de los acusados, quien es su único titular.

Tras recibir el ingreso, se realizaron ese mismo día dos reintegros, uno con destino al móvil del que es usuario el otro procesado y otro reintegro de 150 euros en un cajero de Barcelona.

Los hechos fueron considerados constitutivos de un delito de estafa del artículo 248.1 y 250.1.1 del Código Penal. Tras reconocer los hechos, cada uno de los acusados aceptó una condena de 1 año y 6 meses de prisión, así como el pago de una multa de seis meses con una cuota diaria de ocho euros y las costas procesales.

En concepto de responsabilidad civil, los acusados indemnizarán conjunta y solidariamente las víctimas con 450 euros, más los intereses legales correspondientes.