Apuntan a una atención, en el caso de las Administraciones Públicas, más ágil y personalizada
GIJÓN, 16 May. (EUROPA PRESS) -
El director del Área de Gobierno Abierto y Servicios Generales en el Ayuntamiento de Sant Feliu de Llobregat, Mario Alguacil, ha destacado este jueves en Gijón cómo los datos y su análisis puede ayudar a anticipar riesgos de vulnerabilidad social en una ciudad.
Así lo ha indicado, en declaraciones a los medios de comunicación, antes de participar en el II Congreso de Desarrollo Local, bajo el lema 'Cohesión Social e Igualdad de Oportunidades en la era de la Inteligencia Artificial', celebrado en el recinto ferial 'Luis Adaro'.
Esto sería posible gracias a combinar datos que las organizaciones tienen de los perfiles usuarios de los Servicios Sociales con datos del ecosistema, como pueda ser la economía, el paro o la inmigración. Con ello se consigue hacer una modelización del tipo de sociedad que se tiene y así anticiparse a los futuros riesgos.
Como ejemplo, ha apuntado que en su Ayuntamiento se han hecho tres dimensiones de un mismo proyecto, la primera una analítica de tres ciudades catalanas y la segunda centrada en la brecha digital, que es a su juicio una de las vulnerabilidades a las que las sociedades se enfrentan.
En tercer lugar, se trata de un proyecto con financiación europea en el que participan cinco ciudades y con el que se hará un piloto para 500 personas, a través de un dispositivo basado en IA por el cual el usuario de los Servicios Sociales puede dialogar sin barreras de acceso. Como ejemplo, ha citado desde llamar a los bomberos, al médico, pedir cita a los Servicios Sociales o hablar con familiares.
Por otra parte, ha incidido en que el temor a su uso no viene tanto porque la herramienta digital en sí sea una amenaza sino por las distintas derivadas de esta tecnología en la fase más de creatividad o de usos, donde hay una capacidad de creación al margen de la intervención humana.
Dicho esto, ha incidido en que la Inteligencia Artificial se está usando de forma transparente en muchísimas cosas de la vida, como cuando se buscan contenidos en las televisiones inteligentes (Smart TV) y plataformas de pago, cuando se usan cámaras de videovigilancia o en retransmisiones deportivas.
El riesgo, a su parecer, viene por el desconocimiento al cual se enfrentan las personas con estas nuevas capacidades. Ha remarcado, a este respecto, que todo esto se va a acelerar en el momento que la computación cuántica y las redes de comunicaciones de alta capacidad se acaben desarrollando. A su juicio, ahora mismo ese es el freno que va a dar tiempo para ponerse a la altura de lo que viene.
Ha apuntado, por otro lado, que la IA tiene "costes importantes". Dicho esto, ha recalcado que esto guarda relación con el tipo de computación actual.
Según Alguacil, la capacidad de proceso tiene unas necesidades energéticas y de refrigeración importantes. Sobre ello, ha indicado que se estima que una consulta a través de ChatGPT consume tres cuartas partes de litro de agua, por lo que si todo el mundo lo usara, se necesitarían unas cantidades ingentes de agua.
Eso sí, ha matizado que, a futuro, lo más probable es que la tecnología evolucione hacia capacidades de computación sin tanta necesidad de calor ni de refrigeración. "Ahora mismo estamos en un 'impasse'", ha señalado.
También se ha referido al tema Nerea Luis, doctora en Ciencias de la Computación y divulgadora de Inteligencia Artificial, quien ha dado la ponencia titulada 'Impacto de la IA y otras tecnologías en los servicios de la Administración Pública.
Esta ha puesto de ejemplo de uso de la IA en la automatización de documentos. Para ella, la IA está en pleno desarrollado, aún debe madurar, pero sí se empieza a ver, por ejemplo, el uso de chatbot. Estos se podrán hacer "más versátiles", según ella, en el sentido de que se adapten mejor al perfil de cada usuario con el que interactúa.
Ha indicado, también, que se está hablando de generar nuestros propios modelos de IA, entrenados con documentos en español, si bien ha señalado que esto se hará más a nivel gubernamental.
Se necesita, eso sí, formación para manejarla y ver qué tipos de uso son viables en términos de coste, ya que precisan de ciertas infraestructuras. También ha llamado la atención sobre que se trata de una "carrera a largo plazo".
Ha apuntado, además, que puede aumentar la capacidad de los propios trabajadores para que lo hagan con más calidad o de forma más rápida. No obstante, ha reconocido que puede haber parte de la población que tema quedarse fuera.
A su juicio, esto requiere de "mucha sensibilización" por parte de las organizaciones y por parte de los propios técnicos que trabajan en esta herramienta para conseguir que los sistemas se adapten a cualquier tipo de contexto. "Es posible", ha afirmado.
Ha indicado, por otra parte, que de momento se conocen pocos casos de uso práctico, aunque ha citado el de la Real Academia de la Lengua Española y todo lo que se ha ido operando alrededor de las conocidas como 'smart cities'.
Ha recalcado, en este sentido, que se trata de una IA que no se ve, pero que al final está detrás de cámaras o de analíticas. Sí que hay pilotos relacionados en su mayor parte con asistentes conversacionales, en lo que se refiere a interacción con el ciudadano. Ha remarcado, asimismo, que la IA es "muy potente" en sectores como Sanidad o Justicia y aquellos donde se gestionan muchos documentos.
ACORTAR BRECHA DIGITAL
Por su lado, la directora de Innovación Digital y Gobernanza del Dato en el Ayuntamiento de Viladecans, Patricia Moreno, ha explicado que ellos están poniendo en marcha ya proyectos como el de gemelos digitales urbanos o la incorporación de la IA a la aplicación de ciudad 'Viladecans&Tú' y 'Viladecans Soluciona', así como su uso para el vídeo streaming de deportes locales del municipio.
Los ciudadanos, con ello, pueden ver cómo los servicios digitales que se ponen a su disposición se hace con la menor fricción posible, dejando atrás la brecha digital y facilitando el acceso a los servicios.
También se gana en tiempos de respuesta y en calidad, según ella, además de permitir anticiparse hacia los retos del futuro, con el horizonte de 2030. Se podrá, además, planificar mejor todo lo que se ponga en marcha, con una capacidad de resiliencia mayor, porque hace prever y poder anticiparse a problemas o retos futuros. Al tiempo, reduce riesgos.
A mayores, ha incidido en que, si se pone al servicio de la ciudadanía adecuadamente, se favorece que las personas mayores puedan acceder a la misma. De hecho, ha puesto de ejemplo que en Viladecans la IA incorporada libera "de ciertas cargas" a la persona que usa el servicio.
En el caso de 'Viladecans Soluciona', se usa IA para conseguir una clasificación automática de las incidencias. El ciudadano solo tendría que remitir una foto de la incidencia a través de esta aplicación, sin necesidad de tener que tipificar muy bien esta. Es más, ha apuntado que desde que se puso en marcha se ha constatado un 15 o 17 por ciento más de incidencias, lo que supone un incremento de la participación ciudadana.
DESIGUALDADES
Ya durante el congreso, al que han acudido presencialmente 160 personas y casi 100 online, ha hablado en el acto inaugural la vicealcaldesa de Gijón y concejala de Economía, Empleo, Turismo e Innovación, Ángela Pumariega, quien ha visto e la IA una tecnología para solucionar retos de las ciudades pero que puede llegar a generar desigualdad.
"Si tenemos en cuenta a aquella ciudadanía que ahora mismo no es capaz de utilizar la tecnología para hacer uso de nuestros servicios como Ayuntamiento, y los formamos y evitamos el riesgo de exclusión tecnológica y digital, conseguiremos una cohesión social e igualdad de oportunidades reales", ha apuntado Pumariega.