La alcaldesa ve importante traer a la actualidad la "actitud y valores" del ilustrado gijonés
GIJÓN, 8 Nov. (EUROPA PRESS) -
El director del Museo Nacional del Prado, Miguel Falomir, ha destacado este viernes que traer el retrato del ilustrado gijonés Gaspar Melchor de Jovellanos pintado por Francisco de Goya a Gijón era la elección "más lógica y con sentido" dentro del programa 'De gira por España', con motivo del bicentenario de la institución museística.
Falomir, ha apuntado que exhibir este cuadro en la Casa Natal Jovellanos supone traer el retrato "a su casa". Así lo ha manifestado en rueda de prensa, acompañado de la alcaldesa gijonesa, Ana González, en la Casa Natal Jovellanos donde desde este día y hasta el 8 de diciembre podrá verse el famoso cuadro.
Asimismo, ha explicado que fue pintado en 1898 por Goya, quien guardaba una relación personal con Jovellanos, al que retrató en dos ocasiones. De Goya ha destacado que es traer a Gijón el gran pintor vivo que había en España cuando abrió el Museo Nacional del Prado, a lo que ha animado a disfrutar de la obra expuesta en Gijón.
Es más, ha incidido en que la exposición que se inaugurará el próximo día 19 por el Bicentenario, está dedicada a Goya. Unido a ello, ha resaltado que el museo del Prado es el "museo de todos".
La alcaldesa, por su lado, ha destacado que el de este día, en el que el vecino gijonés seguramente más ejemplar, Gaspar Melchor de Jovellanos, vuelve a su casa, es "sin ningún género de dudas un acontecimiento".
Ha recordado, también, que sus restos reposan desde 1940 en la capilla de los Remedios, pared con pared junto a la casona solariega donde nació, y que la ciudad sigue invocando su figura "como referencia, como precedente y guía".
JOVELLANOS DEL SIGLO XXI
Para la alcaldesa, el haber sido pintado por Francisco de Goya es sin duda una de las forma que dejan una presencia tal "que el retratado llega a convertirse en su retrato". "Para muchas personas, Jovellanos es este Jovellanos en lienzo y óleo que hoy recibimos aquí casi como si viniese en carne y hueso", ha indicado.
González ha hecho repaso a la relación histórica del pintor y el ilustrado gijonés. Ha incidido, además, en que por dos veces este retraso estuvo en su ciudad natal: la primera en esa misma exposición de 1998 y la segunda con motivo del bicentenario de su muerte, en 2011, como parte de la muestra La luz de Jovellanos, en el Palacio de Revillagigedo.
Por este motivo, ha destacado la generosidad del Museo del Prado, "clave" en esas dos ocasiones, y también en esta, donde "viaja por primera vez hasta su Casa Natal en una muestra de gran fuerza simbólica, con mucho de histórico, pero también de íntimo, de emotivo para nosotras y nosotros, los herederos de aquella ciudadanía gijonesa que con tanto orgullo y dedicación cultivó siempre Jovino", ha indicado.
En esta línea, ha agradecido a Falomir, la "generosidad y la delicadeza" que ha vuelto a tener al incluir este Museo-Casa Natal de Jovellanos en su programa conmemorativo 'De gira por España'. Al tiempo, le ha felicitado por el reciente Premio Princesa de Asturias, así como por el bicentenario "y por el acierto con el que lo estáis conmemorando y compartiendo", ha apostillado.
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Sobre el cuadro, ha augurado que vamos a disfrutar con él durante un mes "que seguro que se nos hará corto y cuya presencia, por tanto, vamos a exprimir".
Ente sentido, ha señalado que se ha programado un "intenso" programa de actividades elaborado por el Museo-Casa Natal, en el que se incluye una exposición sobre la colección de dibujos del ilustrado, un ciclo de conferencias con ponentes de primerísima línea, talleres y visitas guiadas.
"Creo que cualquier ocasión es buena, y esta mejor que ninguna, para hacer que el retratado vuelva a cobrar el protagonismo a partir de su retrato". Ha abogado, incluso, por traer a Jovellanos al siglo XXI. "Es perfectamente posible, e incluso, más que nunca, necesario", ha asegurado.
La alcaldesa ha aclarado que se refiere a traer a este tiempo "su actitud y sus valores: su pasión ilustrada y su confianza en la razón humana; su ciudadanía militante e incansable; su tolerancia y su temple; su respeto por la verdad; su preocupación por el bienestar público y su defensa de la educación como el principal medio para conseguirla; su búsqueda de nuevos recursos para asegurar la prosperidad general y su sensibilidad hacia la naturaleza y el entorno natural".
"Ese hombre de gesto bondadoso, pensativo y quizá un poco atribulado en su serenidad seguramente le estaba dando vuelvas a alguna de esas cosas, o a varias de ellas a la vez, mientras Goya le pintaba en su despacho de ministro", ha especulado sobre el famoso retrato.
"Es probable que Jovellanos también estuviese añorando en este retrato su instituto, esta tierra y estas paredes, soñando con regresar a ellas para quedarse", ha agregado, antes de añadir que fue algo que nunca conseguiría.
"Gracias en nuestro nombre, Miguel, por permitirnos que Jovellanos esté, aún más, entre nosotros, y gracias por hacer llegar hasta Gijón la riqueza del patrimonio común que tan bien custodiáis, exhibís y divulgáis en nuestro mejor museo. Y casi me atrevería a decirte también: gracias en nombre de Jovellanos", ha concluido.
