Pérez Cueto seleccionó a Renedo como jefa de servicio porque entendía que cumplía todos los requisitos

OVIEDO 6 Mar. (EUROPA PRESS) -

El que fuera director general de Modernización, Telecomunicaciones y Sociedad de Información de la Consejería de Administraciones Públicas y Portavoz del Gobierno de 2007 a 2011, Alberto Pérez Cueto, ha relatado este miércoles el proceso por el que seleccionó a Marta Renedo, la funcionaria imputada en el caso 'Marea', como jefa de servicio en su momento. Pérez Cueto ha dejado claro que fue una decisión suya y que la seleccionó porque cumplía los requisitos y, entre otras razones, porque "tenía mucha experiencia".

Pérez Cueto ha comparecido este miércoles en la comisión de investigación del caso 'Marea', la presunta trama de corrupción en la contratación pública que afectó a la última administración socialista y por la que están imputados, entre otros, el exconsejero de Cultura, José Luis Iglesias Riopedre y la exdirectora general de Planificación, María Jesús Otero.

En la sesión de este miércoles Pérez Cueto ha dejado claro que su superior entonces, la exconsejera Ana Rosa Migoya, también imputada, no propuso el nombre de Renedo en ningún momento. "Nos dijo que, sobre los jefes de servicio, buscásemos los que eran los mejores, señalando que ella no iba a intervenir en ese proceso", ha indicado.

De esta forma, su tarea era buscar al "mejor" candidato. Antes que a Renedo llamó a otras personas para ocuparlo, pero no llegó a fructificar ninguna de las gestiones. No era una cuestión sencilla, ha relatado, porque necesitaba que cumpliese todos los requisitos legales y que además tuviese la experiencia necesaria para acometer una labor tan importante como la de modernizar la administración. "A cada persona que conocía en la Administración le preguntaba, fue un proceso casi viral", ha indicado.

"Consulté a varias personas, a veces indirectamente", ha recordado. Llegó a proponérselo a dos personas, pero en ambos casos la respuesta fue negativa. A Marta Renedo la conoció entonces. Reunía los requisitos y le hizo una entrevista personal. "No era una persona nueva, había pasado por muchos servicios y tenía mucha experiencia; al final aceptó", ha señalado, indicando que entonces le pareció una persona válida. Completó así la propuesta de los cinco jefes de servicio que finalmente propuso a la consejera y que fue aprobada.

"NO LO PENSÉ"

Los miembros de la comisión le han recordado que Marta Renedo había sido cesada por la entonces consejera de Cultura, Encarnación Rodríguez Cañas, que en la propia comisión reveló que lo hizo al entender que no era una buena profesional.

Al ser preguntado de las razones de que no se hubiera interesado por ese cese ni pidiese recomendaciones, Alberto Pérez Cueto ha respondido: "No lo pensé". De hecho, ha señalado que pensó que la salida de Renedo de Cultura podía deberse a que cada departamento del nuevo Gobierno llegaba con sus equipos de confianza y se producían cambios que no tenían por qué llamar la atención.

DETECCIÓN

Pérez Cueto, licenciado en Filosofía, ha narrado de forma pormenorizada la forma en la que descubrió las presuntas irregularidades que apuntaron a Marta Renedo. Fue en febrero de 2010 cuando vio el grado de ejecución de los presupuestos de 2009. Allí detectó que un par de partidas tenían un grado de ejecución "sorprendentemente alto".

En principio, lo interpretó como un dato positivo, como un "logro". Así, se interesó por las facturas del expediente. Entonces miró en la contabilidad y vio en los apuntes a una empresa denominada Implans Mounts, en un expediente de una partida de unos dos millones, ejecutada casi al cien por cien. "No me sonaba de nada ese nombre", ha indicado, señalando que empezó a pensar que se trataba de un error y que quizás correspondía a otro departamento.

Lo comentó, ha relatado, con el secretario general técnico de la Consejería de Administraciones Públicas. Tras pasar unos días, el secretario le dijo que se había interesado por la empresa y que la administradora única era la propia Marta Renedo. "Parecía evidente que había algo irregular", ha manifestado Pérez Cueto.

Una vez realizada esa consulta pidió archivos de expedientes de contratos. "Lo hice sólo, con discreción", ha relatado. Ha indicado que accedió a los mismos percatándose que se le había "manipulado" su propia firma para autorizar los contratos. Descubrió que esta práctica afectaba a todas las jefaturas de servicio.

Decidió volver a hablar con el secretario técnico. "Le dije que creía que pasaba algo raro", ha manifestado. Y el secretario le dijo que había que abrir un expediente, de tal forma que Pérez Cueto puso por escrito todas las irregularidades. Ese escrito dio origen, una vez consultado por Migoya, al cese inmediato de Marta Renedo como jefa de servicio y a la apertura de procedimiento disciplinario. "El día 19 de febrero de 2010 puse en conocimiento de Marta Renedo tanto su cese como su suspensión; lo hice en mi despacho", ha recordado. Desde la Consejería trasladaron también a la Justicia lo que habían descubierto.

A final de la semana, ha proseguido, llegaron dos agentes de Policía para registrar el despacho de Marta Renedo. Y le pidieron a Pérez Cueto buscar una fecha para explicar la denuncia que se había realizado desde la Consejería.

Pérez Cueto ha manifestado que él desconocía que estuviese abierto antes un procedimiento judicial sobre este asunto o que la Agencia Tributaria hubiese pedido datos sobre una identidad falsa que supuestamente habría utilizado Renedo.

CONTROLES

Al ser preguntado sobre si creía que habían fallados los controles en la contratación pública, Pérez Cueto ha respondido que las personas que quieren burlarlos siempre lo hacen "sin levantar sospechas".

Así, ha considerado que en este asunto no caben soluciones mágicas. No obstante, ha dicho a los miembros de la comisión que quizás sería conveniente que no sólo los altos cargos, sino también las personas encargadas de los contratos, como los autores de los pliegos, se sometieran a medidas de transparencia.