VALLADOLID 25 Nov. (EUROPA PRESS) -
El Grupo Municipal Socialista del Ayuntamiento de Valladolid ha exigido la dimisión del alcalde de la ciudad, Jesús Julio Carnero, al considerar que ha "cruzado todas las líneas rojas que pueden tolerarse en un responsable público" tras la ruptura definitiva del convenio de 2017, la paralización indefinida de la integración ferroviaria y el "bloqueo" de la disolución ordenada de la Sociedad Valladolid Alta Velocidad (SVAV).
"La ciudad asiste atónita al empecinamiento de un alcalde que sólo tiene un perdedor: Valladolid", ha asegurado el Grupo Socialista, quien ha acusado al alcalde de mantener una actitud "boicoteadora y mala fe" en la reunión de la Sociedad celebrada este lunes.
A juicio de los socialistas, Carnero no solo alarga la agonía de un proyecto "clave" para coser la ciudad, sino que "tortura" a Valladolid manteniéndola "atrapada" en un conflicto que aseguran que él mismo ha "provocado" y además "la condena a tener que pagar una deuda millonaria aún por cuantificar".
"No se trata de un episodio aislado. Desde su llegada a la Alcaldía, el señor Carnero ha convertido la integración ferroviaria en rehén de su campaña permanente a favor del cuento del soterramiento que los estudios encargados por el propio Ministerio y por Adif han demostrado inviable", ha asegurado el PSOE.
Además, ha añadido que, pese a conocer estos datos, el alcalde ha preferido "vivir del cuento, prolongar una promesa imposible y hacer perder tiempo y dinero a la ciudad y a sus vecinos", ha señalado el portavoz del Grupo Municipal Socialista, Pedro Herrero.
Los socialistas creen que "el boicot" se ha concretado en decisiones "muy claras" como el veto al paso del Arco de Ladrillo, la negativa reiterada a ejecutar los pasos de Ariza, para los que ha afirmado que Carnero "llegó a inventarse un supuesto 'caos circulatorio'" de lo que mostró este lunes un informe técnico "provisional".
En esta línea, ha apuntado que, desde la citada reunión de la SVAV, todo han sido "excusas para seguir bloqueando las obras de permeabilidad, alargar el 'cuento imposible' del soterramiento y acercar a la ciudad al precipicio en el que ya se encuentra, sin soterramiento y, por culpa del alcalde, también sin integración".
"IRRESPONSABILIDAD" Y "CHANTAJE"
Además, el PSOE cree que el último ejemplo de lo que ha calificado de "deriva irresponsable" se produjo este lunes, cuando el secretario de Estado de Transportes ofreció desbloquear inmediatamente los tres pasos de Ariza y seguir hablando después del resto de cuestiones y Carnero "respondió con un chantaje inaceptable" pidiendo la paralización de la estación de trenes para arrancar con Ariza.
A este respecto, el Grupo Socialista ha censurado que el alcalde haya llegado "al extremo" de pedir que se congelen durante años unas obras "estratégicas", valoradas en más de 200 millones de euros que han afirmado que convertirán la nueva estación de Campo Grande "en la tercera estación de Alta Velocidad más importante de España", algo que consideran que hace "sólo para mantener vivo su relato".
Por ello, creen que la petición "inhabilita" a Carnero como alcalde "al ser de una frivolidad impropia de quien ocupa la máxima representación de la ciudad".
Los socialistas han advertido de que "las consecuencias de este boicot son inminentes" porque la disolución de la SVAV, en los términos en los que han afirmado que ha "forzado "Carnero, condena al Ayuntamiento a asumir una deuda "millonaria" aún por cuantificar y "tira a la basura" inversiones ya comprometidas en permeabilidad urbana, accesos y reurbanización financiadas mayoritariamente por otras administraciones.
"Valladolid corre el riesgo de tener que soportar una losa financiera que pagarán durante años la ciudadanía. Ningún alcalde que diga querer a su ciudad puede presumir de semejante balance", ha advertido Herrero.
Además, el PSOE ha criticado que el Ayuntamiento haga un "bloqueo sistemático" de cualquier espacio de diálogo y evaluación dentro de la propia ciudad y ha recordado que PP y Vox ya rechazaron en el Pleno la propuesta del Grupo Socialista para crear una Comisión Especial de Evaluación de la transformación ferroviaria de Valladolid.
"El mismo alcalde que exige mesas, informes y reuniones a Madrid niega a la oposición y a la ciudadanía los instrumentos mínimos de control y participación", ha afirmado Herrero, quien considera que es una demostración de que Carnerno no tiene un proyecto para Valladolid y "su única obsesión es seguir viviendo del cuento del soterramiento para no hacer nada".
Así, los socialistas consideran que, con su comportamiento, el alcalde "evidencia que Valladolid le importa menos que su propio interés político" y somete a Valladolid "a una auténtica tortura política" con la "condena a vivir en un permanente déjà vu ferroviario, siempre atrapada en el mismo debate estéril, mientras los trenes de la modernización pasan de largo".