Diputación y Ayuntamiento de Barcelona reivindican la rehabilitación urbana como apuesta de futuro

BARCELONA, 5 May. (EUROPA PRESS) -

La presidenta de la Diputación de Barcelona, Núria Marín, y la segunda teniente de alcalde del Ayuntamiento de Barcelona, Janet Sanz, han reivindicado la rehabilitación urbana como apuesta de futuro y motor de transformación, no solo del espacio público sino también de su vertiente comunitaria y social.

Ambas han inaugurado este jueves el curso 'Las nuevas políticas de rehabilitación urbana: necesidades y perspectivas', dirigido por el presidente del Consejo Asesor del Plan de Barrios de Barcelona, Oriol Nello, y la presidenta del Observatori Metropolit de l'Habitatge de Barcelona (O-HB), Carme Trilla.

"El futuro pasa por el hecho urbano, que ha sido central en la configuración de nuestro proyecto europeo y que está basado en los valores de rehabilitación urbana", ha destacado Marín, que ha detallado que estos valores son la igualdad, la solidaridad, la equidad, la democracia y la justicia, entre otros.

Para la también alcaldesa de L'Hospitalet de Llobregat (Barcelona), "esta rehabilitación urbana va bastante más allá de la reparación física" porque también está relacionada con la recuperación de las comunidades y la generación de oportunidades para los vecinos, según ella.

Además, ha subrayado que "Barcelona es más que Barcelona" y ha destacado el papel del Área Metropolitana de Barcelona (AMB) en este modelo y de la Diputación de Barcelona en su tarea de velar por los 311 municipios de la provincia.

LA CULTURA DEL REPENSAR

Por su parte, Sanz ha defendido que la rehabilitación y regeneración urbana "serán las protagonistas de la transformación de Barcelona pero también de municipios de los territorios" y ha insistido en su idea de plantear una nueva propuesta de modelo urbano.

En ese sentido, ha apostado por la regeneración del espacio público al que aboga por darle usos como la vivienda, el comercio y la industria, que provoque que los barrios tengan "un índice de calidad urbana suficiente para hacer un proyecto de vida autónomo".

"Esta manera de hacer de nuevo no corresponde al siglo XXI, sobre todo en un contexto de emergencia climática", por lo que ha reivindicado la cultura del rehacer, del repensar, y adaptarse a las nuevas necesidades, ha dicho.