Entidades del tercer sector reivindican la energía como derecho fundamental para una vida "digna"

BARCELONA, 3 Abr. (EUROPA PRESS) -

La Taula del Tercer Sector Social ha reivindicado el reconocimiento de la energía como derecho fundamental para una vida "digna", y ha pedido que su acceso sea universal, sostenible y a un precio justo.

Es una de las conclusiones del dossier 'La energía como derecho: un reto social ante la pobreza energética', elaborado por la Associació Ecoserveis en colaboración con el diario Ara y el Hub Social y presentado este jueves, informa la Taula en un comunicado.

El documento reivindica el acceso a la energía como derecho para garantizar la dignidad y el bienestar de las personas porque permite cubrir necesidades básicas como cocinar, iluminar, conservar alimentos, tener agua caliente o no pasar frío ni calor.

POBREZA ENERGÉTICA

La Taula urge a garantizar ese derecho ante las dos crisis recientes --la invasión de Ucrania y la Covid-19--, que han tenido un fuerte impacto en el acceso a la energía, con unas proyecciones climáticas que predicen una aumento de las olas de calor y un parque de vivienda de baja calidad que incrementa el consumo de energía.

Según la 'Encuesta de Condiciones de Vida 2024' del Institut Català d'Estadística (Idescat), cerca del 18% de la población catalana no puede mantener su casa a una temperatura adecuada, un porcentaje que dulpica el de 2019 (8%).

Las entidades han atribuido la pobreza energética, principalmente, al coste fluctuante de las facturas, los bajos ingresos económicos de los hogares y la baja calidad de la edificación de la vivienda, y han recordado su impacto en el bienestar físico y psicológico.

RECOMENDACIONES

La Taula recomienda mejorar el diagnóstico e identificación de la pobreza energética en Catalunya con estudios exhaustivos, evaluaciones y mejor coordinación, así como mejorar y actualizar la Estratègia Nacional contra la Pobresa Energètica 2019-2024 y reforzar la información, la transparencia y el apoyo.

A nivel legislativo, abogan por medidas de protección al consumidor vulnerable, trabajar por el Convenio sobre pobreza energética (Ley 24/2015) entre Generalitat y grandes compañías energéticas, y mejorar el bono social reduciendo la carga burocrática excesiva y revisando criterios, entre otros.

También defienden incluir las personas vulnerables en el diseño de medidas y políticas, adecuar las financiaciones para que sean accesibles --particularmente de rehabilitación energética--, exigir transparencia y auditoría de costes al mercado energético, así como consolidar e impulsar programas de consolidación de energías renovables.