Giménez Bartlett retoma a la inspectora Petra Delicado con un caso centrado en la pornografía infantil

Actualizado: martes, 23 octubre 2007 20:32

BARCELONA, 23 Oct. (EUROPA PRESS) -

La escritora Alicia Giménez Bartlett retoma a su inspectora de Policía Petra Delicado, uno de los iconos de la novela policiaca española, con la pornografía infantil como telón de fondo, en una historia mucho más dura que en libros anteriores y en la que su vida personal también da un giro importante.

El libro de Giménez Bartlett, 'Nido vacío' (Planeta), es la séptima entrega de las historias de Petra Delicado, quien investiga un caso de pornografía infantil que se va complicando a partir de un incidente que le afecta personalmente.

Giménez explicó hoy que el tema de los abusos a menores y la pornografía infantil es "muy inquietante" y se preguntó cómo alguien puede "comerciar o divertirse" con ello. La escritora quiere creer que no hay personas absolutamente malas, sino que actúan movidas por circunstancias desfavorables como maltratos anteriores o una situación socioeconómica difícil.

Para sacar la idea de la novela, Giménez Bartlett no se basó en ningún caso concreto aparecido en la prensa, sino en el creciente número de operaciones policiales que se desarrollan contra la pornografía infantil. En Catalunya, por ejemplo, en 2005 se detuvieron a 39 personas relacionadas con hechos similares, mientras que en 2006 fueron 65.

Además, los casos de pornografía infantil suponen el 80% de todos los que tienen que analizar los peritos informáticos del Cuerpo Nacional de Policía (CNP) en Barcelona.

A partir del segundo capítulo de las historias de la inspectora, Giménez Bartlett se documentó sobre la temática policial con conversaciones con la inspectora Margarita García, a la que agradeció sus consejos.

En esta ocasión hizo lo mismo, pero no quiso contemplar imágenes de niños víctimas de abusos ni entrar en 'chats' donde hay adultos intentando contactar con menores porque no tuvo "narices". La escritora aseguró no "necesitar" ver la "miseria moral" para imaginarla. Además, intentó tratar la cuestión con "mano izquierda".

Para ella, la pornografía infantil ha sido el elemento más "duro" de abordar de todas las novelas de Petra Delicado.

Por ello, intentó mantener cierta distancia con la cuestión. "No tenemos que conmovernos sino hacer conmover al lector", como decía el escritor ruso Fiodor Dostoievski, señaló Giménez. "No quiero ser una guía para los lectores" sobre la pornografía infantil, añadió.

También quiere ser cuidadosa con los inmigrantes rumanos y no "señalarles", que en su novela son los responsables de los atroces delitos.

LA LACRA DEL SIGLO XXI.

Como explicó también a los periodistas el inspector jefe de Delitos Tecnológicos del CNP en Catalunya, Benjamín Blanco, la pornografía infantil a través de Internet es la "lacra" del siglo XXI.

Antes de la aparición de la red, los pederastas actuaban solos, escondidos en parques o lavabos y actuaban con miedo a ser descubiertos. Ahora, gracias al anonimato que les proporciona Internet, actúan mucho más libremente. Al principio se conforman con el simple 'voyeurismo' cibernético, pero a continuación ya quieren contactar con los menores y citarse en persona con ellos. Lo más peligroso es que no hay un perfil concreto de pederasta.

Por ello, el inspector jefe recomienda a los padres que supervisen a sus hijos cuando se conecten a Internet y que enseñen a sus hijos a usar la red. También considera "imprescindible" que esta cuestión se aborde en la nueva asignatura de Educación para la Ciudadanía.

Los expertos en la cuestión también explicaron a los periodistas, ante la atenta mirada de Giménez Bartlett, cómo se investigan estos casos, aunque "nunca lo explican todo", aseguró la escritora, para no dar pistas a los delincuentes.

"VAIVENES AMOROSOS".

Pero la novela también significa un "punto de inflexión" en la vida privada de Petra. "Sufre un cambio personal", influido, en parte, por la investigación. Ya no será la mujer joven y atractiva que 'liga' con muchos de los hombres que la rodean, si no que deseará una vida más rutinaria y tranquila.

Estos "vaivenes amorosos" dan un giro al personaje, del que Giménez Bartlett ya empezaba a estar un poco "aburrida".