BARCELONA, 30 Abr. (EUROPA PRESS) -
El secretario de Estado de Seguridad, Ignacio Ulloa, ha avisado este lunes al Síndic de Greuges, Rafael Ribó, que el Centro de Internamiento de Extranjeros (CIE) no es lugar para "ir de tournée", después de habérsele negado hace días la entrada al centro de Barcelona por no tener competencias.
"No tiene las puertas cerradas siempre y cuando no perturbe el régimen ordinario", ha asegurado en una rueda de prensa celebrada tras visitar el centro, donde ha explicado las líneas básicas del nuevo reglamento que regirán estos centros, acompañado de la delegada del Gobierno, María de los Llanos de Luna.
"El centro de internamiento no es un laboratorio sociológico. Quien entra en el centro, entra para ayudar y no para obstaculizar", ha remarcado Ulloa.
Ha recordado que quien tiene la competencia de entrar en el centro es el Defensor del Pueblo, y que en todo caso el Síndic de Greuges también puede inspeccionarlo, pero siempre por delegación del primero.
Ulloa ha recordado además que estas labores de inspección también las hace la Fiscalía y, en el caso de Barcelona, dos jueces de instrucción.
La visita del secretario de Estado de Seguridad al centro llega en pleno debate sobre las condiciones en las que viven los internos, después de que dos de ellos hayan decidido hacer una huelga de hambre en protesta contra presuntas agresiones, y después de que cuatro llegaran a autolesionarse para ingresar en el hospital y posponer así su extradición.
El Síndic, que sospecha "irregularidades", lamentó hace días que no le hayan permitido contrastarlas, y además pidió a Interior que reconsiderara la expulsión de los dos internos del CIE que estaban en huelga de hambre para criticar los supuestos maltratos que habían recibido.
