BARCELONA, 10 Feb. (EUROPA PRESS) -
El presidente del PP y candidato a las elecciones generales, Mariano Rajoy, aseguró hoy que el programa electoral de su partido "no es el de los obispos", ya que coinciden "en algunas cosas y, en otras, no". Según Rajoy, la Iglesia no ha pedido el voto para el PP, pero tiene derecho a opinar.
En una entrevista en 'El Periódico de Catalunya' recogida por Europa Press, puso como ejemplo de ello que en su programa de 2004 se incluía una propuesta de uniones civiles homosexuales, "que no era la de los obispos", similar a la de Francia, Alemania o Reino Unido.
Si llegara a gobernar, Rajoy dijo que esperará el fallo del Tribunal Constitucional sobre el término 'matrimonio' para definir las uniones entre homosexuales, y aunque aseguró que respetará "los derechos que se reconozca" a los gays y lesbianas, dijo "discrepar" del derecho a la adopción por parte de estas parejas.
También quiso ejemplificar su "independencia de criterio respecto a cualquiera" recordando que en 2001 criticó a la Conferencia Episcopal por no apoyar el Pacto Antiterrorista que el Gobierno del PP firmó con el PSOE.
Por ello, dijo que "desde luego, los obispos no han pedido el voto para el PP", aunque reclamó el derecho de la Iglesia a "exponer sus posiciones", igual que él no ha criticado que la Junta Islámica haya "dado su apoyo al PSOE".
Sobre otras cuestiones polémicas para la Iglesia, el líder del PP confirmó que no modificará la ley del aborto, pero intentará garantizar "que se cumpla" mediante las inspecciones que corresponden a los gobiernos autonómicos.
"DESTIERRO DE LA DISCRIMINACIÓN SEXUAL".
En otra de las cuestiones polémicas de su programa, el contrato de integración para inmigrantes, dijo que los recién llegados tienen que compartir los valores de la sociedad de acogida, sobre todo el de igualdad entre hombres y mujeres y el "destierro" de los "símbolos de discriminación sexual", como el velo en las escuelas.
Igualmente, justificó su propuesta de contrato para "poner orden, legalidad e integración" en la llegada de inmigrantes. "Ahora mismo España es el país de Europa donde resulta más fácil entrar de manera ilegal y más complicado hacerlo de manera legal", aseguró.
ZAPATERO ENGAÑÓ TRAS LA T-4.
Sobre la suspensión de actividades de ANV y PCTV, Rajoy aseguró que apoyará "todas las rectificaciones" que haga el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, aunque lamentó que durante la legislatura haya "negociado y discutido de política" con ETA. Además, aseguró que Zapatero le engañó, a él y a todos los españoles, al decir que tras el atentado de la T-4 de Barajas había terminado las conversaciones con la banda terrorista.
Sin embargo, admitió que quizá no tuvo que haber dicho que el presidente del Gobierno "había traicionado a los muertos" y reconoció que "unas veces uno está más afortunado y otras menos".
"SOLBES ESTÁ AGOTADO".
El presidente del PP también se refirió a la situación económica, "uno de los grandes fracasos" del Gobierno socialista, según él, ya que a Zapatero "no le preocupa". Rajoy dijo que no "ve para esto" al vicepresidente económico, Pedro Solbes, ya que está "agotado", por lo que "se ha limitado a vivir de la herencia y la inercia". "No ha hecho nada y ahora ni siquiera quiere reconocer la realidad; es evidente que quien no reconoce la realidad no está dispuesto a cambiarla", afirmó.
En contraposición a ello, presentó al número dos de su lista, Manuel Pizarro, como alguien que "ha hecho las cosas bien en la actividad privada", por lo que "es una garantía de que lo hará mejor en la vida pública". Una de sus principales propuestas es bajar el impuesto de sociedades a las empresas si invierten en investigación y desarrollo, y fomentar la flexibilización horaria para facilitar la conciliación de la vida laboral y familiar.
GALLARDÓN PODRÍA SER MINISTRO.
Precisamente, justificó la no incorporación del alcalde de Madrid, Alberto Ruiz Gallardón, en la lista tras poder contar con Pizarro y señaló que el edil de la capital española "debe dedicarse en exclusiva" a la Alcaldía.
Sin embargo, no descartó nombrar ni a Gallardón ni a la presidenta de la Comunidad de Madrid, Esperanza Aguirre, como ministros. "No descarto nombrar a ninguno de los dos, a ninguno; creo que son dos personas capaces y lo harían muy bien. Para el Gobierno de España contaré con los mejores", aseguró. No obstante, dijo que sólo habrá ministros del PP o independientes, pero de ningún otro partido, al contrario que el presidente francés, Nicolas Sarkozy.
