La CGT reclama "depurar responsabilidades" en algunos mandos de la sección de autobuses de la empresa
BARCELONA, 6 Nov. (EUROPA PRESS) -
Transports Metropolitans de Barcelona (TMB) ha sancionado a un conductor con 15 días de suspensión de empleo y sueldo por llevar una bicicleta en el autobús y "desobedecer la orden de un superior e insultarlo" en el incidente, que ocurrió el 22 de julio. Al día siguiente, el empleado "insistió" en su actitud contra un mando, según informó hoy la compañía en un comunicado.
En una rueda de prensa en dependencias de la CGT, el conductor, Manuel Casado, explicó hoy que el 22 de julio conducía un autobús de la Línea 63 --Universitat-Sant Joan Despí-- con una bicicleta suya atada en el lugar reservado para silla de ruedas y cochecitos de niños.
Según dijo, normalmente lleva una bicicleta plegable, como hacen "muchos compañeros", colocada en un espacio reservado para los enseres del conductor. La plegable la utiliza para desplazarse entre terminales de autobuses que le toca conducir y volver a casa, aunque en aquella fecha llevaba una bicicleta de montaña.
Aseguró que un mando le esperaba en un descanso en la terminal de Sant Joan Despí con actitud "provocativa" y que "hizo bajar al pasaje" para que el empleado retirara la bicicleta, lo que motivó que el conductor lo insultara. "Al final ha venido todo porque yo le increpé, y le increpé porque él me provocó", señaló el empleado, que continuó la marcha con la bicicleta dentro del autobús.
El conductor afirmó que quería dejarla aparcada en la avenida Diagonal, por donde pasa el autobús de la Línea 63, pero finalmente desistió porque el autobús "iba lleno de gente". Mientras esperaba el día siguiente en la cochera a coger un autobús con la bicicleta plegable, otro mando le dijo "que no subiría con ella". "Ya me estaban esperando", aseguró el conductor, que optó por irse a casa.
"CONFIRMADO" POR GRABACIONES
El empleado aseguró que "la provocación se ha visto confirmada" con una grabación posterior al incidente sobre una conversación entre mandos y que difundió hoy la CGT. En la grabación que se pudo oír durante la rueda de prensa, un superior le dice a otro de rango inferior sobre el citado conductor que "se trata de intentar provocarlo un poco a ver qué dice el tío por la emisora".
"De lo que se trata es de que el tío entre al trapo", continúa el primer superior, y sentencia: "Intenta, sin meterle, sin que se vea, provocarlo para que largue a ver qué dice, es para añadirle más datos al expediente que ya se le va a hacer de entrada".
El presidente del comité de empresa de la sección de autobuses de TMB y delegado de la CGT, Saturnino Mercader, reclamó a TMB "depurar responsabilidades" en mandos de la regulación del tráfico de autobuses, retirar el expediente disciplinario "porque es fruto de la provocación", y que la compañía "se disculpe" al conductor.
Según Mercader, a través de las grabaciones se entiende que "la bicicleta es la excusa". "No vamos contra el colectivo de mandos", aseguró Mercader, quien dijo ir a por "dos o tres que, siguiendo órdenes de una dirección reaccionaria, consiguen desprestigiar a un colectivo".
TMB PREPARA ACCIONES LEGALES
La empresa consideró que la difusión de las conversaciones, obtenidas "de manera presuntamente ilegal y presentadas previa manipulación", y de fotografías de los trabajadores que supuestamente las protagonizan en panfletos de la CGT pueden constituir "un delito de intromisión ilegítima a la intimidad".
Por ello, prepara medidas legales "para impedir que la CGT persista en este comportamiento", que, "además de afectar la imagen de unos empleados, puede alterar gravemente el clima de convivencia en el seno de la empresa". También ha abierto una investigación interna para saber cómo se han obtenido las grabaciones.
La empresa puntualizó que en la tramitación del expediente se tuvo en cuenta "los hechos comprobados", con independencia de las grabaciones, que "no cuestionan en ningún caso la existencia de la falta laboral, producida con anterioridad, ni la corrección del procedimiento seguido".
Recordó que la sanción "es firme", porque no ha sido impugnada, y que la CGT "no se ha dirigido a la dirección de la empresa para formular ninguna objeción".
