Avantgarde Regulator, la forma más revolucionaria de marcar el tiempo

MADRID 30 Sep. (EUROPA PRESS) -

La línea relojera más innovadora de Alexander Shorokhoff, la línea 'Avantgarde Regulator', está marcada por una solución técnica Regulator, toda una referencia de precisión en el universo de la Alta Relojería. Los grandes relojes de pared de los laboratorios y departamentos de investigación de finales del siglo XIX y comienzos del siglo XX eran de tipo Regulator, por la exactitud de sus datos.

Esa separación de los ejes de la aguja horaria y la aguja del minutero es la nota distintiva de los cronógrafos y relojes solo tempo 'Avantgarde Regulator'. Los nuevos modelos de Alexander Shorokhoff se caracterizan por su caja de acero inoxidable con 44 milímetros de diámetro, siempre cepillada y pulida a mano, como es norma en todas las piezas creadas en la fábrica alemana de Alzenau.

Los 'Avantgarde Regulator' incorporan, igualmente, dos de las singularidades más llamativas de Alexander Shorokhoff: el movimiento mecánico afinado y decorado por los maestros relojeros de la Marca y los dos cristales de zafiro.

Los movimientos mecánicos con remonte manual calibre 31679 AS para los cronógrafos y calibre 3105 AS para los relojes solo tempo se pulen hasta alcanzar el acabado nube, luego se graban parcialmente los puentes y, por último, se aplica un baño de oro a diferentes componentes emblemáticos. El cristal frontal lleva tratamiento antirreflejos, mientras que el cristal posterior de cada pieza permite descubrir el funcionamiento con un simple vistazo.

GARANTÍA CON SELLO 'MADE IN GERMANY'

Las esferas de todos los Regulator están esmaltadas, con cuatro tonalidades básicas diferentes: plata, beige, gris azulado y negro, que combinan con las correas, de cuero genuino.

La minuciosidad de producción de cada pieza 'Avantgarde Regulator' salta a la vista tanto en la caja, como en el movimiento. El extra de calidad asociado al sello 'Made in Germany' alcanza su nivel supremo tras realizar un ensayo de 100 horas de duración en el banco de pruebas, inédito en relojes con precios comprendidos entre 800 y 1.300 euros.

Alexander Shorokhoff confirma así que sus cronógrafos y relojes Avantgarde reciben los tratamientos artesanos reservados a piezas de Alta Relojería.