¿Te gustaría disponer de un jardín más grande? Si tu sueño siempre ha sido gozar de un jardín de mayores dimensiones y con una gran profundidad puedes probar a sacarle el máximo partido y a intentar que éste pase por un lugar más espacioso. Existen algunos recursos y soluciones para que tu jardín "crezca", o por lo menos visualmente y pueda recrear la ilusión de un terreno más amplio y bien distribuido.
Organizar desde el principio
Es esencial la detenida planificación del jardín. Para empezar hay que contar con los elementos fijos e inamovibles dentro de éste como son la casa, el garaje, la piscina, y todos aquellos obstáculos "insalvables".
Una vez que tengas los metros reales de los que dispones para organizar te será mucho más fácil hacerte a una idea del espacio con el que verdaderamente cuentas y empezar a distribuir la organización del jardín que quieres.
La zona de entrada o la parte central es aconsejable que quede despejada, por una razón y es que el centro del jardín quede diáfano y un lugar donde se pueda disfrutar de la parcela sin agobios, así como que exista un camino libre y fácil por el que trasladarse y moverse por el corazón del mismo.
Reserva la vegetación más frondosa para los límites de la parcela, de modo que recorra todo el perímetro, por ejemplo con setos o arizónica para que además de conferir intimidad al interior del jardín y de la casa el terreno quede bordeado con una cortina de especies que a la vez proporcionarán sombra.
Buenas soluciones
Si es tu caso el de un jardín pequeño conviene que no lo congestiones con muchas especies o con plantaciones de gran crecimiento así como aquellas especies gigantes. Por el contrario están indicados los árboles de tamaño medio y también los pequeños, te permitirán una mayor variedad en cuanto a especies y dejarán volar la imaginación y las miradas sin límite en el horizonte.
Las plantas de lento crecimiento pueden ser otra opción, las palmeras tardan años en crecer y embellecen en gran medida el entorno, también puedes decantarte por los arbustos o algunas otras especies que te atraigan y que por su lentitud de crecimiento en el tiempo no entorpecerán las vistas siempre que las plantes de pequeño tamaño.
Los colores también son un factor decisivo, las flores de vistosas tonalidades cálidas no pueden evitar llamar la atención y convertirse en el centro de todas las miradas. Si tu idea es que se mantengan en primera línea ubícalas en la parte del jardín que más te interese destacar.
Separar por zonas
Contar con distintas zonas dentro del mismo jardín puede ser una buena manera de simular mayor amplitud. Cuando las cosas no se acaban de ver enteras de un solo vistazo el misterio aumenta y la ilusión de espacio también.
El secreto de dividir en ambientes es que en cada uno de ellos exista algo interesante que capte la atención. Por ejemplo, una zona puede ser la de la piscina, otra un rincón con un banco en el que descansar y leer tranquilamente a la sombra, un cenador con mesas y sillas en el que organizar las comidas etc.
Cada zona se puede separar gracias a las innumerables posibilidades de vallas, celosías y demás que también se pueden cubrir con plantas tapizantes y trepadoras, muy decorativas por cierto.
Seguir el camino
Pero sin duda si hay algo que puede aportar grandes dosis de misterio son los caminos. Para enlazar los distintos ambientes puedes construir pasillos por los que recorrer el jardín, mejor si son irregulares porque otorgan sensación de profundidad e intrigan sobre donde terminan.
Por lo tanto es preferible optar por los senderos con curvas y con vegetación de crecimiento también irregular para que no se puedan advertir los límites y queden a merced de la imaginación.
