Kate del Castillo, la Reina del Sur

JOSEFINA BLANCO

MADRID 7 Ene. (Por Estefanía Blasco) -

Es una de las actrices más reconocida en su tierra gracias a su participación en numerosas telenovelas. Ahora, la mexicana Kate del Castillo, hija de la leyenda de la época dorada del cine mexicano Eric del Castillo, llega a España para dar vida a uno de los personajes más afamados de Arturo Pérez- Reverte, Teresa de Mendoza.

De esta forma, la intérprete protagoniza 'La Reina del Sur', una producción internacional para Antena 3 con un reparto que se completa con las figuras de Cristina Urgel, Iván Sánchez y Alberto Jiménez, y que se estrenará en España, Sudamérica, México y Estados Unidos.

- ¿Cómo es tu personaje?

- Teresa es una mujer hecha por la vida. Siempre ha estado sobreviviendo y enfrentado los obstáculos que se le presentan y que ella no quería. Es una mujer que ama mucho, que ha sufrido mucho y que ha llorado mucho. Lo ha pasado muy mal y la vida la sorprende continuamente para que hago fatal le suceda.

- ¿Qué carácter de su psicología es el que más te ha costado trabajar?

- Todos y cada uno de ellos. Lo bonito de ella es que es un personaje real y que va cambiando como hacemos todos. Yo ya no pienso lo mismo ahora que cuando era más joven. Ella es muy humana, la vida la va cambiando y la va endureciendo. A la pobre le pasa de todo, pero es una mujer fuerte y que, a pesar de las cosas tan terribles que la han sucedido, sabe amar.

- ¿Te identificas con tu personaje en algún aspecto?

- En muchos. En lo mejicano, de entrada. Me identifico mucho porque todos vamos cambiando y, como ella, noto que me insensibilizo a ciertas cosas. Creo que a los adultos nos falta la forma de sorprender que tienen los niños, lo vamos perdiendo por circunstancias. Pero ella lo redescubre y yo aprendí a hacerlo con ella.

- ¿Cómo te has preparado el papel? ¿Has hablado con gente del entorno?

- En mi país el problema del narcotráfico es algo tremendo y ahora está la cosa muy fuerte, pero no me hizo falta hablar con nadie, porque no es la forma en que y trabajo como actriz. Conozco muy bien la historia y la he estudiado en profundidad. Lo que me gusta mucho es que en la historia hay una parte de ficción y otra de realidad y no quiero saber cuál es cuál. Mientras vivas el personaje y la historia realmente, no necesitas mucho, a veces es mejor que te sorprendan.

- ¿Cómo ha sido el rodaje?

- Estuvimos cinco meses en Colombia, no pisé mi casa y fue larguísimo, porque en España sólo se van a emitir trece capítulos, pero en Sudamérica, en México y en EE.UU se va a hacer una serie de unos 40 capítulos. Fue un rodaje muy largo y los actores venimos de otros países y tenemos sistemas diferentes. Ha sido difícil, ha habido muchos obstáculos, pero ha sido muy interesante. Los españoles se volvieron mi familia, porque son cinco meses que estás sola y son las únicas personas que ves, te llegas a encariñar mucho porque son divinos todos.

- ¿Compartíais vuestro tiempo libre?

- Claro, salíamos de fiesta todos juntos, aunque hemos tenido muy poco tiempo de descanso. Este ha sido de los trabajos más difíciles. Han sido 16 horas de trabajo diario de lunes a sábado, y he acabado muy cansada. Los días que salía era por necesidad, para despejarme, no por ganas. Además ya estoy bastante mayor y no tengo tantas ganas de fiesta. Pero me encantaba salir a cenar, porque son muy divertidos todos los españoles.

- ¿Cómo ha sido la experiencia del rodaje en España?

- Es fenomenal. Nos han recibido increíble. Estuvimos en Melilla, en Gibraltar, en Málaga y en Marbella. Ha habido escenas de acción súper emocionantes, he manejado lanchas y hemos contado con la presencia de un personaje real de la novela, amigo de Pérez Reverte.

- ¿Crees que ya era hora de que le dieran un papel de acción a una mujer?

- Es difícil que eso suceda, pero yo he sido feliz haciéndolo. Me encanta la acción y casi no había hecho nada de acción en mi carrera, ya que siempre he hecho drama.

- ¿Cómo has afrontado las escenas más movidas?

- Tengo cicatrices por todas partes, me duele todo.

- ¿Cuál ha sido la escena que más te ha costado rodar?

- Han habido varias, porque es un personaje muy intenso: hay una violación muy dura, asesinatos... le pasa de todo.

- ¿Qué diferencia este papel a otros que has tenido?

- La verdad es que he hecho de todo. También hice de narcotraficante en una serie norteamericana que se llama Weeds, pero era otro tono completamente distinto. Todos los personajes son divertidos y son buenos, si estás preparada para hacerlos y si van en coherencia con tu carrera. Aunque yo creo que si este personaje me hubiera llegado hace algunos años no lo hubiera aceptado porque no me hubiera sentido preparada. En esta etapa de mi vida y de mi carrera me siento preparada para lo que venga.

- Has estado muchos meses fuera de casa. ¿Cómo has llevado separarte de tu familia durante tanto tiempo?

- No puedo ni creer que en unos días estaré en mi casa. En el rodaje no me dio tiempo ni de deprimirme, porque no tuve un solo día de descanso. Estoy lejos de mi esposo, de mi perrita, de mi familia, pero vale la pena, porque es mi trabajo y es lo que más amo en la vida y es lo que viví desde pequeña con mi padre. Lo único que quiero hacer es actuar, por eso se que estoy en el lugar correcto.

- ¿Da pudor interpretar a un narcotraficante?

- Lo primero que te enseñan en las clases de actuación es a no juzgar a tu personaje, porque sino no puedes hacerlo tuyo. Hay cosas que yo nunca haría, pero tienes que ponerte en sus zapatos. Todos nos equivocamos en la vida y todos comentemos errores, todos vamos por la vida lastimando a gente que no queremos, cada uno con sus circunstancias. Mi personaje no quería ser narcotraficante, es a lo que le ha llevado la vida. Aunque tampoco defiendo el narcotráfico. Solo intento de entender a mi personaje, es la historia de una mujer y lo demás es circunstancial.

- ¿Qué valores imperan en la serie?

- El valor que se desprende de esta serie no tiene nada que ver con la política o con la situación, que, por ejemplo, se vive en mi país, sino el amor que esta mujer tiene por la vida. Ella aprende a sobrevivir, aunque tenga que hacer cosas horribles.

- ¿Te consideras tan valiente como ella?

- Sí, soy fuerte y valiente para unas cosas y soy muy débil para otras. Conforme va pasando la vida, me voy haciendo más sensible, y antes no era así, aunque ahora soy muy paciente con cosas que no era y no aguanto cosas con las que antes tenía más paciencia. Vas cambiando y vas viendo tus prioridades. Ahora no hago nada que no quiera hacer, ni con la familia. Vas aprendiendo que debes llevar tu vida, porque es más y de nadie más. Este es otro de los valores que se extraen de la novela, el amor a la vida, el estar solo en la vida y saber que nadie más te va a ayudar.

- ¿Por qué se ha puesto tan de moda el prototipo del antihéroe?

- Me encanta, porque te ayuda a identificarte. Todos comentemos errores, todos tenemos malos pensamientos y todos somos humanos.

- ¿Qué impresión te llevas de esta visita a España?

- Me gustaría venir más, me gustaría trabajar aquí. Me encanta el cine español y me he identificado mucho con todos los españoles. Me gustan mucho Amenábar, Fernando León y Almodóvar, por supuesto. Me gusta el cine español porque es honesto y sin pretensiones.

- Das vida a un personaje que han leído millones de personas. ¿No te da un poco de vértigo?

- Me muero de miedo, pero yo solo puedo hacer lo que está en mis manos. He dado el cien por cien de mí, para bien o para mal. Es difícil, porque no se lo que esperan de mí, pero si lo pienso todo el rato, no vivo.

- ¿Qué le has pedido al nuevo año?

- Unas vacaciones, pero no muy largas, porque no puedo estar sin trabajar.