Un economista sugiere que los humanos están evolucionando

   MADRID, 12 Jul. (EUROPA PRESS) -

   Un estudio sobre éxito reproductivo en la vida de un pequeño segmento de la población EE.UU. ha concluido que existe evidencia de que los seres humanos están todavía en evolución.

   En su trabajo publicado en Proceedings de la Academia Nacional de Ciencias, el economista de Harvard Jonathan Beauchamp explica que muchos en la comunidad científica han llegado a creer que el ser humano dejó de evolucionar hace aproximadamente 40.000 años, poco después del advenimiento de la agricultura.

   Pero advierte que hay evidencias que refutan esa afirmación, como la estudios que han demostrado que las personas desarrollaron una capacidad para digerir la leche y vivir a gran altura mucho más recientemente.

   Para obtener más información, realizó un análisis de los registros de 20.000 personas obtenidos del Health and Retirement Study, que tiene datos sobre las personas nacidas en Estados Unidos entre los años 1931 y 1953. Eligió este grupo porque la gran majoría de ellos sobrepasaron la edad infantil, de forma que pudo calcular un índice de éxito reproductivo para cada uno de ellos.

   Además de contar cuántos hijos tenían, midió el índice de masa corporal, la esquizofrenia, la edad de inicio de la menstruación y el nivel educativo, todos ellos rasgos con raíces genéticas.

   Después de estudiar los datos, Beauchamp encontró evidencia de la evolución en dos fenotipos, un leve aumento en la edad de la primera menstruación y una tendencia hacia un éxito reproductivo más bajo para la gente que tenía más educación; por el contrario, las personas con menos educación tenían más hijos y por lo tanto más oportunidades para transmitir sus genes.

   Pero, como reconoce Beauchamp, su estudio se basa en un conjunto de datos muy limitado, y fue constreñido dejó fuera a los niños que podrían haber nacido de las personas incluido en la base de datos que murieron antes de envejecer, por ejemplo.

   Hay también cuestión sobre la edad de la primera menstruación, ya que estudios recientes han demostrado que en realidad se atrasa, no adelanta. Y no hay evidencia de que, incluso si la evolución está en proceso, parece que está siendo anulada por nuestra capacidad de controlar muchos factores de nuestras vidas, tales como el ahorro de las personas que habrían muerto de muerte natural, o medidas de fertilidad artificiales para la educación de las personas que tienen hijos más tarde en la vida.