Descubren ADN de la bacteria de la peste en esqueletos de la Edad del Bronce

Esqueleto con ADN de la peste
Foto: MIKHAIL V. KHALYAPIN
Actualizado: viernes, 23 octubre 2015 11:32

   MADRID, 23 Oct. (EUROPA PRESS) -

   La peste negra arrasó Europa en 1347, matando a un estimado de 50 millones de personas. Sin embargo, ADN de esqueletos humanos de la Edad del Bronce muestran que la plaga tuvo su origen en el 3.000 A.C.

   Ese brote probablemente no se extendió tan ferozmente pero pudo, sin embargo, impulsar migraciones masivas en toda Europa y Asia.

   La bacteria Yersinia pestis es sospechosa de haber causado la peste negra y otras plagas antiguas.

   Descripciones históricas de propagación y síntomas de la enfermedad como rápidas erupciones cutáneas llenas de pus de la enfermedad coinciden con brotes modernos de peste bubónica causada por la bacteria, y se han encontrado restos de antiguas víctimas de la plaga que contienen el ADN de Yersinia Pestis.

   La primera de estas infecciones documentada hasta ahora proviene de un entierro en Alemania vinculado a la plaga de Justiniano del siglo VI. Sin embargo, algunos historiadores sospechan que Y. pestis fue también responsable de brotes anteriores, como la plaga de Atenas, que azotó la ciudad-estado en el siglo V aC, en el apogeo de la Guerra del Peloponeso, informa Nature.com.

   La Edad del Bronce - entre aproximadamente el 3000 y 1000 antes de Cristo - fue un período tumultuoso que vio nuevas prácticas culturales y tecnologías de armas y transporte que se extendieron rápidamente a través de Eurasia. A principios de este año, un par de estudios de genomas amtiguos documentaron un éxodo masivo de gente de la estepa de lo que hoy es Rusia y Ucrania; se dispersaron hacia el oeste en Europa y el este hasta el centro de Asia.

   "Pero no sabíamos cuál era la causa de estas migraciones bastante bruscas", dice Morten Allentoft, genetista evolutivo en el Museo de Historia Natural de Dinamarca en Copenhague, que formó parte de un equipo que secuenció el ADN de 101 esqueletos de la Edad de Bronce.

   Ante la sospecha de que una infección similar a la peste podría haber estado involucrado, el mismo equipo analizó 89.000 millones de fragmentos de datos de ADN de los esqueletos de la Edad del Bronce en busca de secuencias de Y. pestis. Dientes de 7 de las 101 personas dieron positivo, y 2 contenían ADN de la plaga suficiente para generar secuencias del genoma completo. La más antigua de las cepas de peste de la Edad de Bronce provino de una persona que vivió hace casi 5.000 años en el sureste de Rusia, haciendo retroceder a los orígenes de la plaga unos 3.000 años. Los resultados se publican en la revista Cell.