CASTELLÓN, 21 Ene. (EUROPA PRESS) -
El Ayuntamiento de Castellón, a través de la empresa adjudicataria del servicio de recogida de animales (Servican), recuperó un total de 1.566 animales de la calle durante 2007, según explicó el concejal de Sanidad, Miquel Soler, quien destacó la gran cantidad de animales que se han recogido de la vía pública y que se han trasladado a las instalaciones que dispone esta empresa con el fin de que los que poseen dueño puedan ser devueltos a sus propietarios y se eviten accidentes y otras problemáticas.
Así, Soler señaló que estos animales que se encuentran en las dependencias que gestiona Servican suelen llegar allí fruto del aviso de particualres o instituciones públicas, según informaron en un comunicado fuentes municipales.
La mayoría de capturas que se realizaron -549- corresponden a animales recogidos tras un aviso de alguna entidad pública; mientras que 179 fueron capturados tras el aviso de un particular; 29 fueron recogidos directamente a particulares a sus domicilios y 26 fueron donados por personas que no los podían atender.
El concejal de Sanidad también indicó que durante el pasado año fueron más de un millar las salidas de animales que se realizaron desde Servican. El objetivo de este servicio es, principalmente, devolver los perros extraviados o donar en adopción los que no poseen dueño. Además, hay una cantidad que fallece por enfermedad o que es sacrificado a petición de sus dueños o por problemas de salud del animal, según las mismas fuentes.
En 2007, un total de 256 perros fueron adoptados por personas particulares. Además, Miquel Soler hizo hincapié en la necesidad de que los animales dispongan de un chip con el fin de poder ser identificados porque, el pasado año, 168 animales fueron devueltos a sus propietarios gracias a que fueron identificados a través del chip y sólo ocho que no llevaban este dispositivo pudieron ser devueltos.
Así, Soler invitó a todos los propietarios de animales de este tipo a que "les coloquen el chip, ya que es un mecanismo idóneo para poder ser identificados en el caso de que se pierdan y, de esta forma, facilitar el trabajo para que sean devueltos a sus propietarios sin ningún problema".
El número de animales sacrificados a petición del propietario ascendió a 18 y el de animales fallecidos cuyo estado de salud era irrecuperable a 26. A éstos se suman los 319 que perecieron por enfermedad.
El resto de animales permanecen en las instalaciones con el fin de gestionar su adopción en fechas posteriores, según dijo Miquel Soler. En total, el 30 por ciento de los animales que entraron en 2007 en la perrera fueron adoptados o devueltos a sus dueños y más del 50 por ciento permanecen en las instalaciones a la espera de un propietario.
Miquel Soler resaltó "la importancia de concienciar a la sociedad para que no regale cachorros sin tener claro el futuro del animal en casa porque es una responsabilidad y si no se puede atender, es mejor no utilizar al perro como un objeto, sino respetarlo como un ser vivo que es".
