CASTELLÓN, 14 Ene. (EUROPA PRESS) -
La directora general del Libro de la Generalitat, Silvia Caballer, mostró hoy su "más absoluto rechazo" al traslado de los fondos documentales de la Guerra Civil de la Subdelegación de Defensa de Castellón a Madrid, según informaron en un comunicado fuentes del Consell.
"Trasladar un archivo supone privar al colectivo de investigadores de seguir con sus investigaciones, cortar líneas de investigación de la Universidad", indicó Caballer, quien agregó que "no es de recibo que para justificar la creación de supuestos centros documentales se expolie la documentación de otros archivos que funcionan con normalidad".
La Administración estatal está trasladando un importante fondo documental relativo a los procesos sumarísimos realizados en la provincia de Castellón durante los años de la posguerra con destino a Madrid, según las mismas fuentes.
Desde la Dirección General del Libro, Archivos y Bibliotecas, exigieron el "más escrupuloso cumplimiento" de lo dispuesto en el artículo 20, punto 2º, epígrafe "A", de la ley 52/2007, por la que se reconocen y amplían derechos y se establecen medidas a favor de quienes padecieron persecución o violencia durante la guerra civil y la dictadura.
En este artículo se garantiza que de la documentación que pasa a integrarse en el Centro de la Memoria Histórica quedará una copia digitalizada en los archivos de titularidad estatal, como es el caso del archivo de la subdelegación del Gobierno en Castellón.
"Así se podría garantizar el acceso a dicha documentación a los ciudadanos e investigadores castellonenses, algunos de ellos con trabajos de investigación en marcha en estos momentos, evitándoles mayores perjuicios y costosos desplazamientos a otras localidades", declaró Silvia Caballer.
Por otro lado, explicó que la Generalitat valenciana no puede dejar de hacerse una serie de preguntas que la "inquietan, como si es necesario el sigilo y la premura con que la administración central quiere proceder a este traslado de documentación, si existen ya las copias digitales de la documentación y se encuentran depositadas en el archivo de titularidad estatal de la ciudad de Castellón, del que se quieren trasladar los originales".
Asimismo, Caballer se preguntó "si utiliza la administración estatal el mismo rasero con todas las comunidades autónomas cuando traslada originales de la documentación valenciana, mientras devuelve a Cataluña sus originales, dejando copia en el Archivo de la Guerra Civil o no sería más lógico que, en este caso, también quedarán los originales en la Comunitat".
Además, el Consell se plantea "si ha estudiado la administración estatal cómo garantizar el acceso de los ciudadanos castellonenses a la documentación sin causarles graves incomodidades; y si se va a ver afectada en algún otro caso con este nuevo expolio democrático la documentación que forma parte del patrimonio histórico valenciano", según Caballer.
Por su parte, el archivero del Archivo de Vila-real, Vicent Gil, afirmó que "es necesario que la opinión pública conozca y sea consciente de que la documentación tiene sentido en aquel lugar en que se origina". En consecuencia, dijo, "trasladar la documentación de Castellón a Madrid u otras ciudades es una incongruencia archivística, imposible de justificar".
"La Ley de la Memoria Histórica que suponía una normalización para potenciar la investigación y el conocimiento de una época dramática próxima queda diluida cuando se dificulta el acceso a la documentación que permite la reconstrucción de esta memoria histórica", manifestó Gil, quien agregó que "la forma en que se ha decidido y actuado con los Sumarios de Castellón recuerda mucho al caso de los 'papeles de Salamanca'. En este punto, se preguntó si "se actuará de la misma forma en Castellón que con los documentos sumariales conservados en las Subdelegaciones de Cataluña".
Finalmente, también cuestionó si "se va a vestir a un Archivo con la documentación expoliada a otros archivos, en este caso los archivos de las Subdelegaciones de Defensa".
