ALICANTE, 8 Abr. (EUROPA PRESS) -
La Guardia Civil ha desarticulado una presunta organización criminal que se dedicaba al cultivo y venta de marihuana 'indoor' en Redován (Alicante) y ha detenido a siete personas de un clan familiar, cinco varones y dos mujeres de edades entre los 28 y 54 años, como supuestos integrantes de la misma.
En el operativo se ha precisado la actuación de casi 100 agentes para llevar a cabo siete registros simultáneos, en los cuales se han intervenido numerosas armas y munición intervenida. En concreto, dos armas de fuego y 200 cartuchos de munición, tres armas de aire comprimido, 10 armas blancas de grandes dimensiones, más de 400 euros de dinero en efectivo, dos vehículos de gama alta y numeroso material destinado a la plantación de marihuana de forma "indoor".
Por ello, a los siete arrestados en esta operación, denominada 'Operación Rhesconse', se les acusa de los delitos de pertenencia a grupo criminal, amenazas con armas de fuego, tráfico de drogas y cultivo, defraudación de fluido eléctrico, según ha informado el instituto armado en un comunicado.
La operación se inició en julio de 2020, cuando la Guardia Civil de Callosa de Segura (Alicante) tuvo conocimiento que en una pedanía de Redován, denominado el Rincón de Redován, se producían numerosas coacciones y amenazas con armas de fuego, así como una creciente actividad de tráfico de drogas. Un escenario que llevó a crear una gran alarma social en el lugar.
Fruto de esas pesquisas, los agentes hallaron que los principales autores pertenecían todos al mismo clan familiar, además, constataron las amenazas y el tráfico de droga que habían alertado con anterioridad los residentes.
Finalmente, los investigadores descubrieron que la actividad delictiva se ampliaba con el cultivo de forma "indoor" de marihuana, y que para poder realizar las plantaciones, el clan ocupaba casas adyacentes abandonadas, a las que habilitaban para su actividad con electricidad proveniente de farolas de alumbrado público urbano.
CIEN AGENTES
Debido a la magnitud de las actividades ilícitas desarrolladas por este grupo criminal, la Guardia Civil desplegó para la explotación de la operación un amplio operativo el pasado mes de febrero con cerca de 100 agentes actuantes de numerosas especialidades.
Entre ellas figuraban unidades de Alicante y Torrevieja, el Grupo de Reserva y Seguridad (GRS-3) de Valencia, varios equipos del Servicio Cinológico (perros detectores de drogas, dinero y armas), el Servicio de Protección a la naturaleza (SEPRONA) de Orihuela, así como distinto personal del Puesto de la Guardia Civil de Callosa de Segura y la Compañía de Torrevieja.
Los registros en siete inmuebles se saldaron con siete detenidos y con la intervención de armas de fuego y numerosa munición. Todos han pasado a disposición del juzgado de Instrucción número 3 de Orihuela, que tras recibir a los detenidos fueron puestos en libertad con cargos.
