MADRID 18 Abr. (EUROPA PRESS) -
El piloto alemán del equipo Red Bull, Sebastian Vettel, ha reconocido que el Gran Premio de Bahréin es uno de los más complicados de plantear para los mecánicos de los equipos, ya que se tienen que "anticipar" a como va a ser la carrera.
"Para los equipos siempre es un reto anticiparse a cuanto se van a agarrar los coches en esta carrera. En los entrenamientos del viernes, cuando la pista todavía esta 'verde', vamos a necesitar unos ajustes diferentes a los del domingo. Debido a la naturaleza del circuito, los frenos van a ser una parte muy importante", explicó Vettel en declaraciones facilitadas por su equipo.
Además, el doble campeón del mundo asegura que la localización del circuito, "en medio del desierto", hace que la carrera sea todavía más complicada. "La pista obliga a dar mucho a los pilotos, el cambio constante del carácter de las curvas significa que nunca acabas de acostumbrarte a una vuelta", indicó.
"Como está en el desierto, tienes que tener en cuenta la arena, que se mueve con el viento y puede aparecer de repente en nuevos lugares de la pista, así que nunca puedes saber si el coche va a patinar", añadió el piloto germano.
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