MADRID, 30 Abr. (EUROPA PRESS) -
El piloto alemán de Fórmula 1 Nico Rosberg (Mercedes) ha reconocido que la mala fortuna de sus rivales le está haciendo las cosas más fáciles, pero insistió en que todavía tiene que afrontar una dura batalla para llevarse la victoria en un Gran Premio de Rusia en el cual ha conseguido la pole tras una calificación que tildó de "excepcional".
"Ha sido una calificación realmente excepcional para mí. El coche acompañó, el equilibrio fue perfecto, todo fue simplemente bueno", afirmó Rosberg en la rueda de prensa posterior a la sesión de calificación.
Rosberg, ganador de todas las carreras disputadas en 2016 y que acumula seis consecutivas, comenzará la carrera de Sochi desde la pole, mientras que su compañero de equipo Lewis Hamilton lo hará desde la décima posición después de sufrir un fallo en el motor cuando disputaba la Q3. Por su parte, el alemán Sebastian Vettel (Ferrari), que fue segundo, deberá cumplir una sanción de cinco posiciones en parrilla por la sustitución de la caja de cambios de su monoplaza.
"Estaba centrado en mí mismo, y eso fue genial. Otros han estado muy poco afortunados hoy, y eso hace mi carrera un poco más fácil mañana, pero en Fórmula 1 nunca es fácil", señaló el alemán. "Sigue habiendo hostilidad, por lo que necesito seguir concentrado y hacer bien el trabajo. No he pensado mucho en el día de mañana, pero el estado del asfalto me ayuda bastante, eso seguro", indicó.
Por otra parte, el líder del Mundial analizó la sesión. "La primera vuelta fue buena, tenía más combustible por lo que en la segunda podría haber sido más rápido, pero sabía que la primera era suficientemente buena ya que en la Q2 los Ferrari estaban bastante lejos y era consciente de que Lewis no podía participar", subrayó.
"Tengo confianza en que el equipo resuelva los problemas que estamos teniendo en estos momentos, por eso trato únicamente en las cosas que a mí me influyen directamente, quiero hacer una buena salida y tratar de estar delante", cerró.
