MADRID, 15 Jul. (EUROPA PRESS) -
La marca española Idawen ha incorporado una nueva mejora a su máscara deportiva reutilizable que permite sustituir las válvulas de exhalación por clips de sellado para adaptarla a diferentes situaciones de distancia social y protegerse de los brotes por la pandemia de la COVID-19, informa en un comunicado.
Para protegerse y proteger a los demás hay que usar mascarilla, mantener la distancia social y lavarse las manos de forma frecuente. Aunque la mascarilla es obligatoria en ciertas situaciones y en algunas Comunidades Autónomas, es responsabilidad de cada uno de nosotros utilizarla para autoprotegernos y así proteger a nuestro entorno más cercano.
Una de las situaciones en las que la mascarilla no es obligatoria, según la legislación, es mientras se practica deporte porque las necesidades de ventilación pulmonar (inspiración y exhalación) son diferentes que en la actividad cotidiana.
Sin embargo, también es cierto que haciendo deporte es recomendable ampliar la distancia de seguridad, ya que la velocidad del portador y la velocidad de caída de las partículas también varían, por el factor del 'efecto túnel de viento' que producimos, además de tener en cuenta la ventilación del lugar donde se practica deporte, si es exterior o interior.
Por todo ello, es fácil no cumplir la distancia social en un partido de pádel en parejas, mientras se corre por las calles de una gran ciudad, se juega un partido de baloncesto o de fútbol o se practica ejercicio en el gimnasio.
Hacer ejercicio a un ritmo determinado puede ser complicado con una máscara porque se genera más humedad y CO2 y se necesita evacuar para evitar la incomodidad. Por ello, la firma Idawen ha desarrollado una máscara especialmente pensada para los deportistas.
VÁLVULAS DE EXHALACIÓN O CLIPS DE SELLADO
La máscara Idawen incorpora válvulas de exhalación, cuya función es facilitar la respiración, al permitir evacuar el CO2 que se produce y que, al acumularse dentro de la mascarilla, podría reducir la función cognitiva y aumentar la frecuencia cardíaca, al respirar un aire con menos oxígeno.
Las válvulas de exhalación filtran el aire que respira la persona que la lleva puesta, protegiéndola así de los virus y bacterias del exterior y permite la exhalación del CO2.
A pesar de ser una máscara pensada para hacer deporte, Idawen ha querido darle doble funcionalidad para aquellas personas que quieran utilizarla de forma convencional. Por eso, ha incorporado una nueva mejora a su máscara, unos clips de sellado que se pueden colocar en lugar de las válvulas de exhalación, ya que el aire exhalado por la válvula no está filtrado.
Estos clips evitan las fugas de exhalación, y por lo tanto evitan los contagios. Esta nueva funcionalidad es ideal para situaciones en las que no es posible respetar la distancia social o en aquellos lugares de 'espacio limpio' como hospitales. Sustituir las válvulas de exhalación por los clips de sellado es muy sencillo y permitirá adecuar la protección a cada situación y lugar.
DOBLE FILTRO DE PROTECCIÓN
Además, la máscara Idawen incorpora dos filtros diferentes e intercambiables, en función del momento de uso. Por una parte, para situaciones de mayor distancia social, se aconseja usar el filtro de protección antibacteriana confeccionado con Lyocell, un material sostenible con el Certificado Oeko-Tex Standard 100, que absorbe la humedad y es ultrasuave, apto incluso para personas con gran sensibilidad cutánea.
Este filtro, que ofrece un 98,91% de protección antibacteriana (BFE), cumple con la regulación de la Asociación Española de Normalización UNE0065: 2020. Además, es reutilizable y mantiene sus propiedades de protección y confort después de 5 lavados a 60C.
Por otra parte, para situaciones de mayor proximidad social, se aconseja el filtro F9 según norma EN-779:2012, que ofrece protección antivírica en un rango del 75-85 %, ante partículas de 0,3 micras, con valores compatibles con la norma UNE-EN 149:2001+A1, protección que está en el umbral de los valores que aportan las mascarillas FFP2.
Además, la máscara Idawen es reutilizable mediante un simple lavado. De esta forma, se hace frente al impacto medioambiental que tienen las mascarillas desechables.
La máscara Idawen ha sido confeccionada en España con dos tipos de tejidos técnicos y elásticos que permiten su ajuste al rostro: neopreno ultralight de 2 mm de espesor y rejilla 3D de poliéster y punto elástico, que se podrá reutilizar ya que se pueden lavar a 60 C.
Por su diseño ergonómico, la pinza nasal, la posibilidad de elegir talla (S, M, L y XL), el cierre de velcro y los tejidos con los que se ha confeccionado la máscara Idawen se ajusta, impidiendo así tanto las fugas, como la posibilidad de que partículas del entorno exterior penetren.
