MADRID, 18 Sep. (EUROPA PRESS) -
El tenista español Rafa Nadal, número uno del mundo, reconoció que abrir la eliminatoria de semifinales de la Copa Davis ante Estados Unidos, le supone una "tensión extra", aunque confía en hacer un buen partido y poder ganar el primer punto en la Plaza de Toros de las Ventas, en Madrid.
"Empezar es una tensión extra y a ver si puedo jugar un gran partido y dar el primer punto a España. Eso puede hacer que David salga más tranquilo a por la victoria, que seguro que la va a conseguir", afirmó en rueda de prensa tras el sorteo de los emparejamiento.
El mallorquín no cree que la pista, instalada para albergar esta semifinal, esté mejor para el partido de segundo turno. "La pista no creo que cambie de tres horas antes a tres horas después. A alguien le tiene que tocar ser el primero y soy yo. Me da igual ser primero o segundo", apuntó.
Nadal reconoció que le va a costar sentirse "cómodo" en su debut ante Sam Querrey. "Si fuese un partido a nivel de mar y yo rodado sobre tierra podría salir y sentirme cómodo, aunque sea un partido difícil, pero después de varios meses sin jugar en tierra y en altura, no es igual", apuntó.
El manacorí explicó que la bola cae con dificultad por lo que es difícil "jugar con control" y eso puede beneficiar a Querrey. "Puede tener ventaja con su saque. Aquí es más difícil recuperar el tiro de defensa que a nivel del mar y eso va a complicar el partido. Además, ha hecho una buena gira de tierra y soy consciente de que va a ser un partido dificilísimo", añadió.
Por último, el balear reconoció que la final de la Davis de 2004 en Sevilla, en la que España conquistó su segunda 'Ensaladera' fue "muy importante" para su carrera". "Venía de una temporada dura y con una lesión grave y me sirvió para empezar la temporada siguiente muy bien. Esa final contra Andy Roddick fue decisiva", concluyó.
