EDIZIONES, 22 Sep.
El juego del escondite debería ser, en principio, muy fácil para los perros por tener un agudísimo olfato que les permite encontrar a sus dueños se escondan donde se escondan. Pues no es así para Niko, nuestro cánido protagonista del vídeo, que no es capaz de encontrar a su dueña en el escondite más obvio y más fácil de encontrar de toda la casa. El animal corretea por todo el piso en busca de su ama sin darse cuenta de que está detrás de la puerta.
Cargando el vídeo....
Eso sí, Niko no es el único. Lola también juega con su dueño al escondite y tampoco es capaz de encontrarle a pesar de que está escondido tras la puerta. ¿Por qué no utiliza su olfato para encontrarle? ¿Lo tendrá atrofiado? Puede que simplemente les guste no usarlo para poner más dificultad al juego, porque si no es inexplicable.
Cargando el vídeo....
