MADRID, 2 jul. (EDIZIONES)
Joshua Nye, un amante de la ciencia ficción, de 27 años, de Monkton, Vermont (EE. UU.), ha estado dedicando parte de su tiempo libre desde hace más de un año en fabricar su propio robot gigante en el patio trasero de su casa.
El robot, que mide más de 3 metros de altura, está compuesto por tuberías de PVC, tapajuntas de aluminio y cables de bicicletas para articular los brazos. Su fabricación fue posible gracias a la ayuda financiera de Generator Makerspace, una incubadora de empresas relacionadas con el arte, la ciencia y la tecnología, situada en Burlington.
No se trata de una simple escultura metálica. El robot de Joshua es completamente funcional y para accionarlo, tan solo es necesario que una persona se introduzca en el esqueleto y moverlo, tal y como se puede ver a continuación.
"He estado interesado en la robótica desde que era niño, pero no fue hasta hace unos años en que mi interés fue a más", dijo Joshua a Caters.
Con este proyecto digno de una película de Avatar o Alien, Joshua ha podido vivir su sueño; un sueño al que ha llamado 'MARDUK', en referencia al dios babilonio.
