DESCONECTA, 27 Mar.
Bien dicen que el hombre es el único animal que tropieza dos veces con la misma piedra. A Christopher Miller le metieron en la cárcel por haber robado en una zapatería para niños y al día siguiente de haber salido, vuelve a ingresar en prisión por haber robado en la misma tienda, según informa la policía a la NBC.
En 1999, un joven Christopher Miller fue detenido después de que atara y amordazara a los empelados de la tienda de zapatos 'Stride Rite' en Toms River, los encerrara en la trastienda y huyera con el dinero.
El viernes pasado, y después de cumplir 15 años de condena, Miller salió de la cárcel, y según cuenta la policía, al día siguiente cogió un autobús a Toms River y fue directo a la misma tienda de zapatos.
En esta ocasión, irrumpió en el local exigiendo dinero y amenazando a los trabajadores con encerrarles en la trastienda, a lo que se negaron. Miller entró en estado de nervios y arrancó el cajón de la caja registradora con 389 dólares para llevárselo consigo, no sin antes despojarles también de sus teléfonos móviles para huir a pie.
Pero muy lejos no podía ir y, efectivamente, la policía se le encontró a pocos metros de la tienda. Los móviles los había tirado a un cubo de basura y el dinero estaba escondido en una cuneta.
El jefe de policía de Toms River ya se plantea el hecho de que Miller considere la prisión su verdadero hogar ya que no encuentra una explicación lógica a lo que ha hecho. "Tal vez sea esa la única vida que conoce, y lo que se le ocurrió para volver a ella fue volver a la misma tienda y repetir el delito".
Ahora, Christopher Miller, con 40 años, está acusado de robo y está detenido bajo fianza de 100 mil dólares.
