DESCONECTA, 25 Mar.
Presenciar una aurora boreal, al menos una vez en la vida, es una cosa que todo aquel que pueda debería permitirse el capricho de hacer. Sin embargo, el hecho de tener que realizar un viaje hasta alguna de las regiones del círculo polar, en meses tan concretos donde estos fenómenos se pueden ver, hacen esta excursión algo exclusiva.
Alexis Coram, una fotógrafa apasionada de su trabajo, del que se siente parte, quiso compartir su último proyecto, publicado en la web de Vimeo, donde acude hasta el pueblo de Fairbanks, Alaska, para capturar el hechizo y la magia de uno de los fenómenos más espectaculares que la naturaleza nos regala: las auroras boreales.
"He conectado con muchas personas este último año y me he dado cuenta de que muchas de ellas no pueden permitirse ese lujo de ver este tipo de lugares, lo que me hizo pensar en lo afortunada que soy de poder verlo y compartirlo", escribe Alexis en la descripción de su vídeo.
Este pensamiento inspiró a Coram para viajar a Alaska con el objetivo de fotografiar las auroras boreales, que suelen aparecer en los meses más fríos de la región polar, y compartir su experiencia con todo el mundo.
De ese modo, pasó 4 noches a la intemperie esperando a que la magia tuviera lugar enfrente de sus narices. Y lo hizo. Las electrizantes luces de tonos verdosos y magentas bailaron en el cielo para Coram, que supo plasmar todo el hechizo que hay en este tipo de fenómenos, en este espectacular vídeo en time-lapse.
AWAKE - Electric Northern Lights Time Lapse from Alexis Coram on Vimeo.
