MADRID, 19 Sep. (EDIZIONES) -
Todas las mañanas, una profesora de Odisha, en la India, atraviesa el río para dar clases en la escuela primaria Rathiapala. Ni la crecida del río en pleno monzón, ni el calor más abrasador han logrado detenerla en los últimos 11 años.
Ella es Samal, tiene 49 años, y su vocación por la enseñanza va más allá de cualquier obstáculo, por complicado que sea. Desde principios del 2008 lleva repitiendo la misma rutina de siempre y no ha faltado ni un solo día, ni por enfermedad, ni por inclemencias meteorológicas. Y eso teniendo en cuenta que en época de Monzón la corriente del río ha llegado a darle algún que otro susto.
La escuela primaria donde da clases tiene 53 alumnos matriculados y está ubicado al otro lado del río Sapua, a unos 3 kilómetros de su casa en la aldea Jaripal del distrito de Dhenkanal.
En espera de que la propuesta de construir un puente a través de los 40 metros de ancho del río se materialice, a Samal y a otras muchas personas no les queda otra que cruzarlo de cualquiera de las maneras, crecido o seco.
En declaraciones a Hindustan Times, Samal explicó con más detalle cómo es su rutina: "Siempre guardo una ropa de repuesto en la escuela. Cuando estoy cruzando el río, guardo mi teléfono móvil y mis cosas en una bolsa de plástico que coloco sobre mi cabeza. Al llegar, me quito la ropa mojada y me pongo el uniforme. Repito lo mismo cuando me voy a casa. Aunque a veces me he enfermado, nunca me he tomado un día libre".
Su historia se ha dado a conocer en diferentes medios locales tras la publicación en redes sociales de algunas fotografías suyas cruzando el río con el agua hasta el cuello y sosteniendo el bolso sobre la cabeza.
Gracias a la repercusión obtenida, el gobierno de la región revisará de nuevo la propuesta de la construcción del puente para ponerla en marcha cuanto antes.
Además, el Oficial de Educación del Distrito (DEO) Suddhananda Parida ha anunciado que Samal será recompensada por su dedicación.
