MADRID, 5 Nov. (EUROPA PRESS) -
Bombardier contabilizó unas pérdidas de 231 millones de dólares (195 millones de euros) en los primeros nueve meses del año, frente al resultado positivo de 112 millones de dólares (95 millones de euros) del mismo periodo del año anterior, por las disrupciones en la actividad como consecuencia de la crisis del coronavirus.
No obstante, su negocio de aviones, que es el que retendrá una vez complete la venta de su negocio de trenes a Alstom, logró un incremento del 10% de los ingresos en el tercer trimestre, hasta los 1.225 millones de dólares (1.037 millones de euros), por la entrega récord de ocho aeronaves Global 7500.
Asimismo, la compañía canadiense consiguió registrar beneficio entre los meses de junio y septiembre, al ganar 192 millones de dólares (162 millones de euros), frente a las pérdidas de 91 millones de dólares (77 millones de euros) del año pasado.
"En el tercer trimestre aseguramos liquidez adicional con una nueva línea de crédito de 1.000 millones de dólares, mantuvimos nuestras desinversiones y, con las entregas aumentando en todos los negocios, todavía estamos apuntando al equilibrio en el flujo de para la segunda mitad del año, suponiendo que las operaciones no se vean interrumpidas por la pandemia", asegura el presidente y consejero delegado, Éric Martel.
Según su cuenta de resultados, los ingresos totales de ambos negocios alcanzaron los 9.918 millones de dólares (8.400 millones de euros) en los tres primeros trimestres del año, un 14% inferiores, mientras que su resultado bruto de explotación (Ebitda) en este periodo fue de 15 millones de dólares (13 millones de euros).
Respecto a la venta de su negocio ferroviario a Alstom, la compañía sigue apuntando al primer trimestre de 2021 como la fecha en la que se cerrará la operación, con la que espera obtener 4.000 millones de dólares (3.420 millones de euros) en efectivo que irán destinados a la reducción de deuda.
