Se está realizando una auditoría para aplicar propuestas de ahorro energético, energías renovables y nuevas tecnologías
SANTANDER, 29 Ago. (EUROPA PRESS) -
El consumo de energía en el edificio del parlamento cántabro, en la calle Alta, podrá reducirse entre un 40 y un 50 por ciento, o "incluso más", con la puesta en marcha de una serie de medidas que se aplicarán cuando concluya una auditoría energética que está realizando el Instituto de Ingeniería y Tecnología de Cantabria (ITEC) y que estará finalizada en un mes o mes y medio.
Las primeras fases de este estudio ya se han llevado a cabo y han consistido en la toma de datos y recopilación de información sobre la situación actual, con vistas a las posteriores propuestas de reducción de consumo, implantación de energías renovables y aplicación de nuevas tecnologías, respetando siempre las características singulares del edificio, según explicó el director del ITEC, Javier Fernández.
La iniciativa, presentada hoy en rueda de prensa por el presidente de la Cámara cántabra, Miguel Ángel Palacio, y el consejero de Medio Ambiente del Gobierno regional, Francisco Martín, es fruto del acuerdo adoptado el pasado mes de abril por los presidentes de los parlamentos regionales de poner en marcha medidas para reducir el consumo de energía y contribuir así a la lucha contra el cambio climático.
Fernández señaló que, aunque es pronto para avanzar conclusiones, el consumo energético en la sede del Parlamento regional es "razonable", ya que cuenta con bombillas de bajo consumo, el cierre de puertas y ventanas es de gran calidad y en general sus características constructivas son buenas.
Añadió que cualquier obra que se lleve a cabo para conseguir ahorrar energía será "muy limitada" y habrá que "minimizar el impacto", dado que el carácter histórico-artístico del edificio, que tiene más de 200 años, y su carácter representativo.
"TODOS PODEMOS HACER ALGO"
Por su parte, Palacio señaló que la protección del medio ambiente y la lucha contra el cambio climático son dos asuntos "prioritarios" a los que se enfrenta el mundo en el siglo XXI y "todos podemos hacer algo" en ese sentido.
Esa fue la idea que movió a los presidentes de los parlamentos a colaborar en la concienciación de la población y a apoyar todas las iniciativas al respecto, así como a reducir el consumo energético en sus respectivas sedes, explicó. Junto a ello recordó que el papel "didáctico" como "escuela de democracia" del Parlamento regional, que recibe a escolares y estudiantes, a los que también puede servir de ejemplo por su implicación medioambiental, de forma que realice su actividad "con menos gasto" en energía.
Añadió que el Parlamento ha querido abordar este tema, que en su día se trató en la Mesa de la Cámara, contando con la colaboración de la Consejería de Medio Ambiente de cara a la realización de la auditoría. Una idea que, según dijo, el consejero ha recibido "con mucho interés".
Martín, por su parte, destacó la necesidad de tomar ya medidas contra el cambio climático "dentro de esta generación", ya que "conocemos el problema y la solución, y tenemos que aplicarla", dijo. En su opinión, es responsabilidad de todas las administraciones y ciudadanos adoptar, tanto medidas legislativas, como de índole industrial y doméstico.
"LA CASA DE TODOS"
En este sentido, recalcó que el Parlamento "es la casa de todos" y debe implementar medidas para reducir el consumo de energía, lo que supone "un paso más" dentro de las iniciativas puestas en marcha por la Consejería con el mismo objetivo. "Hemos ido por el buen camino y antes que los demás", recalcó Martín.
Javier Fernández, por último recalcó que la Fundación ITEC tiene una "amplia experiencia" en este tipo de auditorías, que ya ha realizado en el ámbito de edificios, administraciones y el sector servicios, entre otros, y señaló que la aplicación de las medidas de ahorro en el Parlamento cántabro supone "un reto profesional" para ellos.
