VITORIA 25 Ene. (EUROPA PRESS) -
El Gobierno Vasco ha valorado "muy positivamente" la reunión que el Consejo Vasco de Participación de Víctimas del Terrorismo ha mantenido este viernes en Vitoria en la que el Ejecutivo ha entregado un documento de resumen con las 31 aportaciones que se han realizado al programa educativo Herenegun, sobre la historia reciente del terrorismo en Euskadi, que se trasladará el próximo curso escolar 2019-2020 a las aulas, en lugar del próximo mes de abril, como se preveía en un principio.
Con este encuentro, el Gobierno Vasco ha iniciado el proceso de diálogo que anunció ayer para sumar el mayor número alegaciones que se han realizado a las unidades didácticas. Se prevé que los contactos se prolonguen durante tres meses y acaben con "el máximo consenso posible".
Tras la reunión del Consejo Vasco de Participación de Víctimas del Terrorismo, fuentes del Ejecutivo han informado a Europa Press que el desarrollo de la reunión "ha estado marcado por un clima de sintonía y receptividad en todos los puntos tratados por parte de todos los participantes, tanto entidades como instituciones".
El órgano está presidido por el catedrático de Derecho Penal y presidente del Instituto Vasco de Criminología, José Luis de la Cuesta, e integrado por miembros del Gobierno vasco, entre ellos el secretario general de Derechos Humanos, Convivencia y Cooperación, Jonan Fernández, representantes de Eudel, y de la sociedad civil, entre los que se encuentran asociaciones de víctimas como la AVT, Covite, Aserfavite, Zaitu, APAVT, la Fundación Fernando Buesa o el Foro de Asociaciones Pacifistas.
El Consejo fue creado en 2010 para canalizar las relaciones de las asociaciones de víctimas del terrorismo con las administraciones públicas en todas aquellas cuestiones que les afecten.
PROPUESTA CON APORTACIONES
En la reunión de este viernes, los representantes del Gobierno Vasco ha presentado el documento titulado "Propuesta para el diálogo en relación con las aportaciones recibidas para el material didáctico Herenegun", con lo que se abre el proceso de diálogo sobre el material educativo.
El borrador del material didáctico del Ejecutivo recibió 31 documentos de alegaciones. Siete de ellas piden la retirada del material al considerar que "blanquea" a ETA, otras siete sugieren "una reforma profunda" para que "deslegitime el terrorismo", y 16 lo consideran "válido" o "adecuado". Por su parte, las principales instituciones universitarias y educativas de Euskadi valoran "positivamente" el programa y realizan propuestas puntuales de mejora.
Tal como explicaron ayer Jonan Fernández y la propia viceonsejera de Educación, Maite Alonso, existen, por una parte, ciertas asociaciones de víctimas del terrorismo y algunos partidos políticos que descalifican el material y que han exigido su retirada", mientras que otras víctimas a título individual y "la práctica totalidad de las instituciones académicas y universitarias vascas" consideran que el material "es válido o adecuado y han hecho diversas propuestas de mejora al mismo".
Además de las reflexiones del propio Gobierno sobre este asunto, el texto resume el contenido de las aportaciones planteadas al proyecto 'Herenegun' por partidos políticos, agentes educativos, colectivos de víctimas y ciudadanos particulares.
El Ejecutivo divide estas aportaciones entre las que consideran "adecuado" el material de Herenegun y plantean medidas de 'mejora', las que sugieren una reforma 'profunda' del plan, y las que lo cuestionen en su totalidad.
Entre quienes consideran positivo el plan, se encuentran el Consejo Escolar de Euskadi, la UPV/EHU y las universidades de Deusto y Mondragon, Kristau Eskola, Ikastolen Elkartea, Zaitu, La Fundación, un 26 víctimas y seis ciudadanos a título individual.
Los agentes que creen necesaria una reforma profunda del plan son Gogoan, Argituz, ASEFARVITE, Elkarrekin Podemos, PSE-EE, una víctima a título individual y la Delegación del Gobierno en el País Vasco. Por su parte, la Fundación Víctimas del Terrorismo, la AVT, Covite, APAVT, Fundación Buesa, PP, un grupo de profesores y EH Bildu cuestionan el programa en su integridad.
"FOMENTO DEL PENSAMIENTO CRÍTICO"
Entre quienes consideran positivo el programa Herenegun, el Consejo Escolar de Euskadi subraya su potencialidad como instrumento para fomentar el "pensamiento crítico" y la "deslegitimación de todo tipo de violencia".
La UPV/EHU, en una línea similar, subraya que este plan aporta "un marco de referencia para un debate plural, crítico y con fibra ética", mientras que la Universidad de Deusto rechaza que el programa sea "equidistante" o trate de "diluir la responsabilidad de ETA". Mondragon Unibertsitatea aplaude que se trate de fomentar "una conciencia crítica sobre la violencia".
En el caso de Kristau Eskola, considera que los materiales incluidos en el proyecto son "muy válidos", mientras que Ikastolen Elkartea no critica los contenidos, aunque plantea algunas modificaciones de carácter procedimental. Zaitu, a su vez, no ve "motivos" para las "protestas" que ha suscitado el programa en algunos sectores.
REFORMA "PROFUNDA"
Entre quienes plantean una reforma "profunda" de Herenegun, Gogoan pide "pulir" algunos de sus contenidos, y considera que "el sufrimiento de las víctimas de ETA no se refleja bien". Argituz cree que en el plan se deberían incluir referencias históricas que vayan más allá de lo que supuso el terrorismo, ya que en Euskadi "también había vida más allá de la violencia y la política".
Asefarvite pide otorgar un mayor "protagonismo" a las víctimas, y Elkarrekin Podemos cree necesario incorporar testimonios de asociaciones de víctimas y "explicitar que las diferentes violencias tenían una motivación política". El PSE-EE, por su parte, considera que en el plan "no queda bien reflejada la esencia terrorista de ETA", mientras que la Delegación del Gobierno piensa que Herenegun no deslegitima a ETA de forma "nítida".
En el bloque de aportaciones que cuestionan el proyecto en su totalidad, la Fundación de Víctimas del Terrorismo pide la retirada de los materiales por estimar que "alimentan la teoría del conflicto", una reflexión con la que coincide Covite, que considera que el plan "justifica la historia de ETA".
Covite critica que los materiales del programa "omiten" el daño causado por ETA, y la APAVT también pide que se retire el material didáctico, al estimar que "justifica" el terrorismo. La Fundación Fernando Buesa censura que el programa plantea "una mezcla de violencia que confunde" y presenta un "sesgo nacionalista".
A su vez, el PP señala que en el programa "no pueden aparecer ni exmiembros de ETA ni miembros de la izquierda abertzale que no condenen a ETA". Aunque EH Bildu no ha presentado aportaciones de forma oficial, el Gobierno Vasco refleja en su documento que la coalición ha rechazado el programa, por considerar que no refleja su "visión" de lo ocurrido.