Recuerda que fue el museo el que "actuando con la máxima celeridad y transparencia" despidió a Cearsolo y denunció los hechos
BILBAO, 6 Dic. (EUROPA PRESS) -
El grupo parlamentario del PNV criticó hoy el dictamen elaborado por la comisión de investigación de las irregularidades del Guggenheim por considerar que el "único responsable del delito y fraude" del Guggenheim es el ex director de Administración y Finanzas, Roberto Cearsolo. Además, recordó que fue el museo bilbaíno el que, "actuando con la máxima celeridad y transparencia", despidió a Cearsolo y denunció los hechos.
En un comunicado, el PNV aseguró que el dictamen elaborado por la comisión de investigación de las irregularidades del Guggenheim "no se atiene a los hechos y datos recogidos durante las sesiones de trabajo en Ponencia" y que "así lo atestiguan" los representantes de la formación en la comisión, Leire Corrales y Ricardo Gatzagaetxebarria.
La formación jeltzale recordó, en relación con las ilegalidades cometidas por el director de Administración y Finanzas de pinacoteca, Roberto Cearsolo, que "en las sociedades Inmobiliaria y Tenedora del Museo Guggenheim Bilbao existen y siempre han existido procedimientos que garantizan el correcto control de su operativa por parte de la Dirección y de sus Consejos de Administración".
"La prueba es que la única vía que pudo tener el Cearsolo para trasgredir el control fue la comisión de varios presuntos delitos, la alteración de cuentas societarias y de diversa documentación mercantil", subrayó.
Según el PNV, la razón de que las detracciones no se hayan detectado en 10 años "no reside en la falta de control", sino que "responde a la suma de varios comportamientos delictivos realizados por el señor Cearsolo". "En resumen, presentaba una apariencia donde no se detectaban irregularidades y proporcionaba a las distintas instancias (el Consejo, el Tribunal de Cuentas, los auditores) la información ya manipulada", agregó.
DOCUMENTACIÓN CONTABLE Y FINANCIERA
Según recordó la formación nacionalista, Cearsolo "había solicitado y obtenido indebidamente y de manera oculta y fraudulenta claves de disposición telemática a pesar de no contar con poderes de la sociedad para realizar este tipo de operaciones". "Igualmente, se encuentran indicios de falseamientos en la documentación contable y financiera con posterioridad a su presentación e incluso aprobación por parte del Consejo de Administración", agregó.
También incidió en la constatación de manipulaciones de extractos bancarios con el fin de eliminar cualquier rastro sobre los movimientos irregulares", además de "la existencia de cheques emitidos por el señor Cearsolo falsificando la firma del Director General del museo, único apoderado de las sociedades".
"Tal como ratificaron los auditores ante la Comisión de Investigación, el modus operandi seguido por Cearsolo tenía un grado de sofisticación suficiente como para ocultar de manera efectiva las detracciones y la forma en que las realizaba", aseguró.
MÁXIMA RESPONSABILIDAD
A juicio del grupo parlamentario del PNV "la máxima responsabilidad del desfalco en el Museo Guggenheim la tiene el señor Cearsolo, único responsable del delito y el fraude". "No vale extender las responsabilidades. Ya desde que saltó la noticia se ha intentado preestablecer una responsabilidad política que no se atiene a la realidad. Se ha hecho un uso político desmedido en torno a este tema", censuró.
PNV consideró que el caso remite a "una persona que ha traicionado la confianza que en ella había depositado la entidad" y recordó que "fue el propio Museo, actuando con la máxima celeridad y transparencia en aras del interés público el que procedió al despido quien las había cometido, a la denuncia, a la realización de un dictamen pericial que investigara en profundidad las cuentas afectadas y las posibles detracciones de fondos de las mismas, y a la implantación de nuevos procedimientos que impidieran que acciones de este tipo se repitieran en el futuro".
Los jeltzales reiteraron que "sin restar importancia a lo sucedido" resulta "fundamental" que todos "actúen con mesura y responsabilidad, juzgando y evaluando los hechos en sus justos términos".
"Es difícil negar la evidencia de los resultados del efecto Guggenheim como motor cultural y económico de Euskadi y Bilbao y, por encima de otros intereses, no olvidemos que la institución se ha erigido en símbolo de regeneración y modernización de la sociedad vasca", agregó.
Por último, el PNV instó a "respetar al máximo la imagen del Museo y no empañar la labor de todos sus responsables y profesionales con nuestras actuaciones". "El éxito es frágil y mantenerlo exige un trabajo constante", concluyó.
