BILBAO, 16 Nov. (EUROPA PRESS) -
El Grupo Popular en las Juntas Generales de Alava defenderá mañana en pleno una iniciativa en la que pide al Gobierno vasco que transfiera a las diputaciones 1.229.648.988 euros anuales mientras no se disminuya en diez puntos el coeficiente de aportación de los entes forales al Ejecutivo.
Según la moción del PP, el objetivo de esta iniciativa es mejorar la financiación foral y municipal ante la "difícil" situación que viven algunos ayuntamientos "por la recesión económica y la falta de una ley de financiación municipal".
"El actual momento de crisis y la falta de un modelo eficaz de financiación local y foral pueden empezar a afectar de manera muy importante a los servicios que prestan los ayuntamientos, especialmente los de índole social", señala el texto.
Los populares consideran que "la situación financiera de muchos municipios e incluso de la propia Diputación es difícil y se está agravando de manera sustancial en los últimos meses" porque "la caída generalizada de la economía vasca y española tiene una especial incidencia en las arcas municipales y forales".
En este sentido, advierte de que se está registrando un descenso de los ingresos locales vinculados a la actividad urbanística, "hasta el punto de que han dejado de situarse en el 20 por ciento del total de ingresos municipales.
El PP también alude al "problema estructural" de la financiación local que se lleva arrastrando en Euskadi en los últimos 30 años, debido, entre otras cosas, a que "los Ayuntamientos prestan numerosos servicios sin ser de su competencia, por ser la administración más cercana y a la incapacidad del Gobierno vasco de plantear una ley de financiación municipal".
Además, los populares creen que "es urgente poner en marcha reformas institucionales y en el ámbito de financiación para poder solucionar estos problemas".
A su entender, el Gobierno vasco debe reconocer "la importante labor y el esfuerzo económico que en materia de dependencia están desarrollando los municipios y la Diputación foral en la actualidad". "Por ello, la negociación y ejecución de un nuevo modelo de financiación local y foral debe ser inminente para posibilitar a las instituciones más cercanas al ciudadano afrontar los nuevos retos de futuro, que pasan por una mejor y mayor atención a la dependencia y la extensión de servicios de tipo social", concluye.
