BILBAO 1 Dic. (EUROPA PRESS) -
El trabajador fallecido a primera hora de esta tarde en la autopista Supersur, a su paso por Bilbao, tenía 38 años y murió "prácticamente al instante" después de que la cayera encima una roca desprendida del interior de un túnel, en el que estaba reparando una máquina.
Según el avance del informe de Osalan, el hombre, de iniciales A.I.T., llevaba 30 meses trabajando en la empresa Obras Subterráneas S.A., perteneciente a la UTE Arraiz.
El varón reparaba una máquina perforadora marca Jumbo en el interior del túnel Arraiz, cerca de la boca Peñascal, en la zona central de la cavidad, conocida como clave de la bóveda.
Precisamente una roca desprendida, por causas que se están investigando, de la parte central del túnel cayó sobre el trabajador y lo aplastó, causándole la muerte "prácticamente al instante".