Día 8.- José Manuel Calderón dice que se convertirá "en el mejor embajador de Extremadura"

CÁCERES, 8 Sep. (EUROPA PRESS) -

El deportista extremeño y recientemente Campeón del Mundo de Baloncesto, José Manuel Calderón, dijo hoy en su discurso tras recibir de manos de Rodríguez Ibarra la Medalla de Extremadura, que se convertirá en "el mejor embajador de Extremadura" y pidió a los políticos "independientemente del cargo que ocupen" que aúnen sus esfuerzos para "engrandecer nuestra tierra".

Con estas palabras el joven de Villanueva de la Serena quiso destacar su compromiso con Extremadura y dijo encontrarse "emocionado y orgulloso de ser extremeño". Calderón señaló que sus sueños como jugar en la NBA o ganar la Copa del Mundo de Baloncesto "se han cumplido con mucho trabajo, pero nunca soñé con recibir esta medalla que para mí es el galardón más preciado de toda mi carrera".

Por su parte, la Medalla concedida a Concepción Álvarez del Restaurante La Troya de Trujillo fue recogida por su nieto Ulises Barquilla y su nuera Carmen Blanco. Ésta última señaló en sus palabras de agradecimiento, que la muerte de "Doña Concha" el pasado 8 de agosto ha impedido que ella misma pudiera recogerla y destacó el trabajo que realizó "por mantener viva la cocina traidional de nuestra tierra".

El escultor y artesano Miguel Sansón se mostró emocionado al recibir el galardón y en su breve intervención invitó a los extremeños que llevan "implícito" el alma de conquistadores "a que descubran nuevos mercados y nuevas realidades, porque -dijo-- nos toca a todos participar en la construcción de Extremadura".

Por su parte, el escritor y periodista José Manuel Santiago Castelo, rememoró en su discurso el momento en que tuvo que salir de Extremadura "con tan sólo 17 años" y dijo mostrarse confuso porque "éste no es un premio cualquiera, sino la más alta distinción que otorga Extremadura y me la dan sólo por ser extremeño". Castelo dijo que siempre ha llevado a Extremadura "por bandera" y que no padece de localismos.

Por último, el director del Instituto Santa Eulalia de Mérida, Cecilio Muñoz, como organizador del Festival Juvenil Grecolatino, agradeció al Ayuntamiento de Mérida que le propusiera para el galardón y recordó "que cada año, 15.000 jóvenes de toda España asisten a las representaciones de sus compañeros en este festival".

MOTIVOS DE LAS CONCESIONES

Cabe recordar que la concesión de las Medallas de Extremadura 2006 se aprueban en el Consejo de Gobierno de la Junta de Extremadura a "aquellas personas o instituciones que hayan destacado por sus méritos o por los servicios prestados a la región".

Así, este año ha sido galardonado el jugador de baloncesto José Manuel Calderón, nacido en Villanueva de la Serena en 1981. Su carrera deportiva comenzó muy joven, ya que con tan sólo 14 años ingresó en el TAU Vitoria, a los 17 gana con la Selección Nacional el Campeonato de Europa Junior, y en la temporada 2005/06 ficha por los Toronto Raptors de la NBA, con los que se convierte en el primer extremeño que juega en esta liga.

Se suman ahora además a su palmarés el Campeonato del Mundo recientemente celebrado en Japón y la concesión esta misma semana del Premio Príncipe de Asturias del Deporte a la selección de baloncesto de la que forma parte.

Por tanto, la Junta de Extremadura decidió concederle su galardón más importante, "por su intensa y dilatada carrera, a pesar de su juventud, como deportista, así como por el cariño que demuestra por su tierra". Este reconocimiento viene a sumarse al Premio Extremadura del Deporte que recibió en 2002.

FORJA Y HIERRO

También recibió la Medalla de Extremadura 2006 el artesano y escultor Miguel Sansón Serván, en reconocimiento a la "iniciativa empresarial en el mundo de la forja y el hierro, junto al diseño más avanzado y la proyección exterior de la artesanía extremeña".

Este artesano fundó en 1994 la empresa Miguel Sansón S.L. en Almoharín, dedicada al diseño y la fabricación de mobiliario en forja, y a partir de ahí se ha generado una amplia red comercial por toda España. Entre otros galardones, recibe en 2002 el primer premio de artesanía concedido por la Junta, y el Premio Expansión e Innovación.

Otro de los extremeños distinguidos con la Medalla de Extremadura 2006 ha sido el periodista y escritor José Miguel Santiago Castelo, por "su dilatada carrera profesional y su importante faceta como escritor, ensayista y poeta, así como por los servicios que desde su ingreso en la Real Academia de Extremadura de las Artes y de las Letras presta a la comunidad".

Nacido en Granja de Torrehermosa (Badajoz) en 1948, José Miguel Santiago Castelo posee varios premios nacionales de Periodismo, como el "Julio Camba" y el "Martín Descalzo", y como escritor y poeta posee una prolija obra literaria, por la que ha recibido galardones como el Premio de Poesía Hispanidad, el Premio Gredos de Poesía, o el Premio Fastenrath de la Real Academia Española.

FESTIVAL GRECOLATINO

En cuarto lugar, el Consejo de Gobierno también decidió conceder la Medalla de Extremadura al Festival Grecolatino que el Instituto Santa Eulalia de Mérida viene organizando desde 1997 en la capital extremeña durante los meses de abril y mayo, con la participación de jóvenes de toda España.

El objetivo de este festival es potenciar y difundir el estudio de las culturas griega y romana a través del teatro, y por tanto, explicó Pallero que la Junta de Extremadura ha decidido concederle su mayor galardón por "ese acercamiento de los jóvenes a los clásicos, en concreto, aquellos que constituyen la base del componente humanístico de nuestra cultura occidental".

Finalmente, la Medalla de Extremadura también le ha sido concedida a Concepción Álvarez Sánchez, del Restaurante La Troya, en Trujillo, por "su dedicación a las tradiciones culinarias extremeñas, transformando los tesoros de nuestra tierra en suculentos platos, sin que dejen de saber a lo que son".

El Restaurante La Troya fue fundado en 1922, y en sus platos mezcla las buenas materias primas, todas extremeñas, como el queso de Los Ibores, la Torta del Casar o de Castuera, o los vinos de la Ribera del Guadiana, con "el cariño del cocinero". Por eso se ha convertido en un ejemplo de "cómo desarrollar las oportunidades gastronómicas que brinda Extremadura, y fundirlas con grandes dotes culinarias".

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