MÉRIDA 26 Ago. (EUROPA PRESS) -
Un total de 12 agentes del Cuerpo Nacional de Policía y unos 18 de la policía local, más "algunos" agentes de paisano, velará por la seguridad de las personas que acudan a la próxima Feria de Mérida, lo que supone un incremento de un 20 por ciento de los efectivos policiales respecto a la edición del año pasado.
Además, se efectuarán controles de alcoholemia por parte de la Policía a la salida del recinto ferial y en las zonas limítrofes así como en diversas carreteras de acceso a la ciudad por parte de la Guardia Civil.
Estas son algunas de las medidas que se tomaron hoy en la Junta Local de Seguridad de Mérida y que comunicó en rueda de prensa el alcalde de Mérida, Ángel Calle, junto con los delegados de Tráfico y Festejos, José Fernández y Luis Valiente, respectivamente, tras su celebración.
Calle precisó que los efectivos de la Policía Local se repartirán en seis patrullas de tráfico diarias, "más dos o tres de seguridad ciudadana" además de cuatro agentes que se encargarán de la señalización.
En cuanto a los agentes de paisano, éstos se dedicaran a evitar "acontecimientos molestos que siempre ocurren en la feria", como son los pequeños hurtos. Para ello, la policía controlará a los colectivos que se dedican a la sustracción de carteras y móviles utilizando la práctica del descuido.
"Van a ser fácilmente identificados porque muchos tienen que ver con determinadas ventas ambulantes que ocurren en la feria y van a estar identificados porque no están identificados", declaró Calle.
Calle explicó esta paradoja diciendo que este año se incorpora una novedad y es que todos los feriantes van a tener una tarjeta identificativa que acredite que han pagado su terreno y que, por tanto, tienen un espacio para la venta. "La policía va a dedicarse fundamentalmente al control de estos intrusos sobre todo los primeros días de feria", detalló.
En lo que a los controles de alcoholemia se refiere, Calle dijo que es una medida preventiva y una garantía para evitar accidentes en las distancias cortas en el caso de las personas que beben en la feria y luego cogen el coche. A esto hay que añadir los controles de velocidad que establecerá la Policía Local.
Además, Calle animó "a todas las personas" a utilizar el autobús que será gratuito y saldrá desde la parada de autobús situada en la rotonda de entrada al recinto ferial, de 23,00 a 5,00 horas. Además, se ha situado una parada de taxis en la rotonda del barrio. No obstante, el servicio ordinario funcionará con normalidad.
Asimismo, los aparcamientos del ferial van a tener cuatro vigilantes "perfectamente identificados y contratados por el ayuntamiento" y la entrada y salida de vehículos de las cocheras próximas a la zona estarán garantizadas mediante dos grúas que retirarán los vehículos que obstaculicen el acceso a sus garajes a los vecinos.
A esto se suma el control que se va a hacer de los vigilantes de seguridad de las casetas, porque según Calle, "no quieren matones en las casetas".
El edil emeritense se refirió a todas estas medidas de seguridad diciendo que su objetivo es que "todo esté previsto de antemano para evitar cualquier tipo de incidente" y que las personas que vayan a la feria lo hagan "con la voluntad y el derecho que tienen de divertirse y no tener que estar en un ambiente de inseguridad".
CIERRE DE LAS CASETAS
Aparte de la seguridad en la feria, Calle habló de un decreto de alcaldía "que saldrá publicado antes de feria" y que establecerá un límite a las casetas, que tendrán que cerrar a las 07,00 horas y que en caso de incumplimiento, serán sancionadas.
Esta decisión obedece, según Calle, a razones de limpieza del ferial y "para evitar peleas y accidentes".
En cuanto a las tareas de limpieza, Calle aseguró que van a realizarse tres veces al día -mañana, tarde y noche- para que el recinto ferial "sea limpio e higiénico" y una vez en el centro, entre las 21,00 y 21,30 horas aproximadamente.
En el centro, como es el caso de la calle John Lennon, los bares podrán poner seis mesas en la calle de 14,00 a 18,00 horas y a las 21,00 horas, tendrán que dejar de vender y cerrar, porque entran los servicios de limpieza y, según el alcalde, "hay que compatibilizar el derecho a la limpieza y el derecho a la diversión".
Calle también se refirió al horario de carga y descarga en la feria, que será de 08,00 a 12,00 horas y de 18,30 a 20,00, horario que pretende evitar que "no estén entrando camiones cuando el ferial esté lleno".
CASETA DE LA JUVENTUD
Por último, el Alcalde de Mérida solicitó "encarecidamente" a los jóvenes que practican la costumbre del botellón que la lleven a la práctica en la caseta joven, que contará con música, vigilancia policial en la puerta para que no entren menores y seguridad.
Calle detalló que el acceso a la misma será gratis todos los días excepto el sábado día 30 que hay una actividad musical con dj's internacionales por lo que cuesta 10 euros y que, por este motivo, se destinará un espacio acordonado al lado de la caseta joven para el botellón.
El alcalde también manifestó que le gustaría que en Mérida, como ocurre en ciudades como Albacete, a una hora de la madrugada, bajasen el sonido a la mitad en las atracciones y casetas para permitir a las personas que "puedan hablar y no tengan que gritar".
En este sentido, Calle dijo que le parece "absurdo identificar ruido con diversión" y que "se va a intentar" que las casetas que se pasen del volumen de decibelios bajen el volumen.