MÉRIDA, 26 Feb. (EUROPA PRESS) -
El juicio contra un conductor emeritense acusado de atropellar mortalmente a dos menores de 16 y 17 años en la capital extremeña hace cuatro años se suspende hasta el próximo mes de abril como consecuencia de la huelga que mantienen los funcionarios de justicia.
En declaraciones a los medios, el abogado de la acusación particular, Manuel Novaz, lamentó el retraso de la vista oral, cuyo comienzo estaba previsto hoy a las 10.00 horas en el Juzgado de lo Penal Número 2 de Mérida, por considerar que la demora supondrá "una nueva carga emocional" para los familiares que llevan desde el 2004 pidiendo "justicia" por la muerte de sus hijos.
Asimismo, expuso que ha solicitado 12 años de prisión para el conductor M.A.B.L, de 26 años de edad y natural de Mérida, por considerar que cometió "dos delitos de homicidio por imprudencia" y otros "dos por omisión de socorro".
Por su parte, los familiares de las víctimas, Miguel Ángel y Lolo, que cuando ocurrió el siniestro tenían 16 y 17 años de edad respectivamente, recriminaron que no les avisaran de la suspensión del juicio con anterioridad. "No hay derecho, nos podían haber avisado después de todo lo que estamos pasando", censuró Ana Collado, madre de Lolo.
Esta madre, visiblemente emocionada, censuró que por el contrario el conductor que hoy se tenía que sentarse en el banquillo por "matar" a su hijo y al otro joven no ha aparecido ante los juzgados "porque ya le habrán dado la información de que el juicio se ha suspendido", criticó.
HECHOS.
Ana explicó que la tragedia ocurrió el 29 de Mayo de 2004 cuando los menores circulaban en una motocicleta por el puente Fernández Casado de Mérida. Entonces, según relató, el vehículo de los jóvenes fue "embestido y arrollado" por un coche que circulaba detrás, provocando así el fallecimiento de Miguel Ángel y Lolo.
La progenitora de Lolo también denunció la actitud del conductor que, al parecer, también está acusado de un delito de ocultación de pruebas, por "darse a la fuga" tras el atropello y por "esconder el coche" con el que presuntamente acabó con la vida de ambos menores.
Para Guadalupe Vadillo, madre de Miguel Ángel, el aplazamiento del juicio supone un "mazazo" moral, porque según expuso están "destrozados" y sometidos incluso a "tratamientos psicológicos" para intentar paliar en la medida de lo posible su sufrimiento, por la muerte de sus hijos.
