Caballero anuncia que el nuevo diseño estará a finales de año y que se empezarán las obras en enero de 2008
VIGO, 6 Ago. (EUROPA PRESS) -
El Gobierno municipal de Vigo admitió hoy que habrá que "modificar y adaptar" el anteproyecto del futuro auditorio-palacio de congresos, diseñado por el arquitecto César Portela, para que sea viable económicamente y cumpla el pliego de condiciones, pero matizó que se hará sin que ello suponga una merma en la calidad de la obra.
Tras mantener una reunión con responsables de la UTE concesionaria de la construcción y explotación de esta infraestructura, encabezada por Caixanova y Sacyr, el alcalde de la ciudad, Abel Caballero, reconoció que "habrá que retomar el proyecto inicialmente presentado porque es necesario modificarlo y adaptarlo al pliego de condiciones".
Asimismo, el regidor lamentó que se hubiera producido una "mala adaptación" del proyecto inicial al proyecto de ejecución desde el punto de vista económico, y recordó que el diseño de César Portela había pasado de un presupuesto de 93 millones de euros a 154 millones. No obstante, advirtió de que "no se contempla una nueva adjudicación porque empezar de nuevo el proceso sería un enorme fracaso".
En ese sentido, anunció la celebración de nuevas reuniones entre los técnicos municipales y los responsables del proyecto para ajustar el mismo a unos límites que permitan su viabilidad económica y, entre las cuestiones que habrá que revisar, según Caballero, está el encarecimiento de costes (en unos 10 ó 15 millones de euros) en un área de unos 13.000 metros cuadrados destinados a usos hoteleros, zona de exposiciones con cubierta y hostelería.
El alcalde insistió en que el mantenimiento de la calidad de la obra, así como el cumplimiento de plazos y el ajuste al pliego de condiciones son requisitos "irrenunciables" para el Gobierno local, al tiempo que subrayó lo "extremadamente difícil" de esta situación para el ayuntamiento.
PLAZOS Y RESPONSABILIDADES POLÍTICAS
Abel Caballero confirmó que las reuniones técnicas para la modificación del proyecto se celebrarán hasta el próximo 15 de octubre, momento en que se deberán haber decidido los cambios. Así, a 31 de diciembre, el alcalde prevé que ya exista un nuevo proyecto con todas las adaptaciones realizadas, para que "el 1 de enero (de 2008) empiecen las máquinas a trabajar".
El alcalde trasladó "tranquilidad a la ciudadanía, porque en 2010 tendrá el auditorio terminado", a pesar de que le actual Gobierno local se encontró con el proyecto "en una situación peor y más embarrancado de lo que se creía".
Caballero se preguntó por qué el anterior Ejecutivo local no reclamó la presentación del proyecto del auditorio, aunque ésta debía tener lugar en noviembre de 2006. Así, el documento no llegó al ayuntamiento hasta después de las elecciones municipales de mayo pasado y el actual regidor atribuye esta circunstancia al hecho de que el PP "no era capaz de afrontar todo esto", por lo que no reclamó el proyecto.
El alcalde evitó apuntar al arquitecto César Portela como responsable de la polémica en torno al desfase presupuestario del proyecto, señaló directamente al PP, al insistir en que "hay responsabilidades políticas muy serias del Gobierno anterior, que permitió que la obra más importante que tenían en marcha llegara a esta situación".
POSIBLES ALTERNATIVAS
Por su parte, el director general de Caixanova, José Luis Pego, insistió en que los técnicos "tienen que seguir trabajando en los últimos flecos" del proyecto y envió un "mensaje de tranquilidad", ya que "hay voluntad de que el auditorio salga adelante".
Pego recordó que "desde el punto de vista de la concesionaria, hay que garantizar la viabilidad económica" de esta iniciativa, y que el diseño del auditorio y de los usos privados (de ocio, comercial, hotelero, entre otros) debe cumplir el pliego de condiciones "sin una merma en la calidad".
El director general de la entidad financiera gallega aclaró que "el proyecto definitivo aún no está aprobado" y que, en todo caso, "no se barajó ninguna cifra para el presupuesto final". Sin embargo, recordó que "siempre hay posibilidad de exprimir al máximo un proyecto" y reconoció que la ampliación de la concesión (que en la adjudicación quedó fijada en 35 años) "es una posibilidad que estaría encima de la mesa".
