Operarios de Eshor protestan contra la CIG en Ferrol en contra de la denuncia de "esclavismo" realizada por el sindicato

Actualizado: jueves, 8 mayo 2008 22:28

Temen que las afirmaciones públicas de la central nacionalista pongan en peligro el futuro de la empresa y de sus puestos de empleo

FERROL, 8 May. (EUROPA PRESS) -

Un grupo de unos cincuenta trabajadores de la empresa Eshor, en su mayoría encargados y vinculados al departamento de Administración, se manifestaron en las instalaciones del sindicato CIG en Ferrol para reclamar una rectificación sobre las acusaciones de "esclavismo" y "explotación laboral de inmigrantes" que esta semana formuló la central sindical contra esta constructora con sede en Fene (A Coruña).

Los trabajadores acusaron al secretario comarcal de la CIG, Xesús Anxo López Pintos, de "mentir" al afirmar que existía una "explotación laboral" en la contratación de inmigrantes, a los que se les obligaría a firmar una baja voluntaria, sin fecha, que se haría efectiva en el momento en el que sufriesen un accidente laboral, de tal modo que serían despedidos sin ningún tipo de derecho.

Los trabajadores, algunos procedentes de la sede de Madrid, aseguraron que temen que estas afirmaciones perjudiquen la imagen externa de la empresa y deriven en la pérdida de contratos. Como consecuencia, en el "momento de crisis actual", creen que sus trabajos también están en peligro.

Uno de los operarios con rango de encargado, Felipe Pena, aseguró que la dirección de Eshor no tenía conocimiento de esta protesta y que acudieron al sindicato después de haber recibido distintas llamadas de otras compañías, alarmadas ante las declaraciones que había realizado la CIG.

"Hay una crisis ahí y no está la cosa como para tocar esto, menos aquí, que esto es Ferrol", aseguró, al tiempo que afirmó que "la CIG está especulando, y si hay algo, lo tendría que denunciar, pero no difamando".

Uno de los trabajadores presentes en la protesta, Juan Allegue, dimitió hoy como delegado sindical de la CIG, ante la situación que generada y las "calumnias" realizadas por Xesús Anxo López Pintos.

En la protesta, también participó un grupo de unos cinco inmigrantes. Uno de ellos, de origen colombiano, aseguró que en ningún momento firmó "ningún documento fuera de la ley" y nunca se sintió amenazado. Según su testimonio, llegó a la empresa, con título de arquitecto pero para trabajar "clavando puntas" aunque en la actualidad ya tiene rango de "encargado".

El grupo de trabajadores anunció que continuarán con sus protestas. La próxima cita será el jueves de la próxima semana, de nuevo, ante el local de la CIG en Ferrol.

"AMENAZADOS POR LA EMPRESA".

Desde el sindicato CIG, su secretario comarcal, Xesús Anxo López Pintos, respondió que no rectificará las acusaciones realizadas contra la compañía. "Como sindicato vamos a denunciar a todas las empresas en las que haya explotación laboral y lo que no me da pena es que la empresa utilice el miedo diciéndole a la gente que ante la denuncia de irregularidades la empresa puede cerrar", explicó.

Hasta el momento, ya se han presentado cinco denuncias ante los Juzgados por un posible indicio de delito en los procesos de contratación de los inmigrantes, en su mayoría procedentes de países como Perú, Ecuador o Marruecos.

La CIG censuró esta semana que Eshor reciba bonificaciones del Estado por la realización de este tipo de contratos a trabajadores a los que después "no se les pagan horas extras, trabajan en sábados y festivos" y, en caso de accidente laboral, se les despide y se les "expulsa" del piso que se les había facilitado alojamiento.

"NO NOS SELLAN NI EL DNI".

Al término de la protesta, uno de los inmigrantes que participó pero que rechazó identificarse, permaneció en el local de la CIG y explicó a los medios de comunicación que había a la movilización instado por el encargado de la obra en la que trabajaba.

Junto a él, un obrero de origen peruano aseguró que a la movilización acudieron trabajadores inmigrantes casi "obligados" por los encargados de la compañía, que les recomendaron acudir a la protesta pero sin indicarles el motivo.