SANTIAGO DE COMPOSTELA, 3 Abr. (EUROPA PRESS) -
El campo gallego ha roto con la tendencia que existía hace tres años en que las nuevas incorporaciones a su actividad agroganadera eran esencialmente masculinas. Por contra, entre 2005 y 2007 el 51 por ciento de las personas que apostaron por trabajar en el campo eran mujeres, un total de 1.098.
"Cambia la tendencia", celebró hoy en la Comisión de Agricultura el conselleiro de Medio Rural, Alfredo Suárez Canal, quien además destacó el "salto cualitativo" que supone esta cifra si se compara con la cifras de incorporación femenina de los años anteriores a la llegada del bipartito al Gobierno de la Xunta: 689 entre 2001 y 2004.
Suárez Canal también puso en valor el relevo generacional que supone estas nuevas incorporaciones a la actividad agroganadera, ya que la edad media se sitúa "entre 30 y 33 años".
En todo caso, los datos ofrecidos por el conselleiro permitieron revelar que este porcentaje femenino del 51 por ciento se reduce al 31 cuando se habla de mujeres titulares de explotaciones prioritarias, aquellas granjas que forman parte del registro de Medio Rural y que cumplen requisitos como contar con un trabajador dado de alta en el Regimen Especial Agrario; entre 18 y 64 años de edad uno de los titulares; y un nivel de renta específico. Estas granjas suponen dos tercios de las 60.000 existentes.
CREACIÓN DE REGISTRO.
Precisamente, el conselleiro aprovechó para anunciar que este mismo año Medio Rural pretende que "vea la luz" un registro que incluya todas las explotaciones que realizan su actividad agroganadera en Galicia, lo que permitirá conocer el número de gente que trabaja en estas granjas sin que estén dados de alta en el Régimen Especial Agrario.
Suárez Canal incidió en la importancia de este registro al facilitar a la consellería una "fotografía precisa" de la actividad agroganadera, ya que admitió la dificultad de Medio Rural para conocer la mano de obra en el rural que no cotice a la Seguridad Social.
SÓLO EL 31% SON TITULARES DE EXPLOTACIÓN.
Por ello, y en base a este registro de 20.861 explotaciones, sólo 6.338 mujeres son titulares de estas explotaciones (31%), frente a las 12.882, cuyo propietario es un hombre (61,7%); y las 1.743 que pertenecen a entidades asociativas como cooperativas (7,8%), aunque el conselleiro remarcó que en ellas hay una "importante presencia" de mujeres.
La actividad por la que se decantan las mujeres es, esencialmente, la de producción láctea, ya que es donde realizan su trabajo 4.378; seguida de la de carne vacuno, 1.212; mientras que en agricultura sólo están registradas como titulars de la explotación 369 mujeres.
20 POR CIENTO DE LAS SUBVENCIONES PARA MODERNIZACIÓN.
De este modo, también se reduce, en comparación con los hombres, el porcentaje de ayudas para modernización y apoyo a la actividad agroganadera. Así, entre 2005 y 2006 de las 3.819 subvenciones concedidas, 1.069 fueron a explotaciones con una mujer como titular, lo que supone el 20 por ciento; frente las 1.799 para hombres (47 por ciento); mientras que el 25 por ciento restante a entidades asociativas.
La orientación productiva de estas explotaciones subvencionadas regentadas por mujeres era en su mayoría (47%) de leche; seguida de las de carne vacuno (15%); ave (10%); hortifrutícola (3%); y porcina (3%).